inflación
Para el Gobierno porteño, la inflación anual supera el 45%
El dato surge del informe de las Canastas de consumo de la Ciudad que midió de julio a julio.

El costo de bienes y servicios de una familia tipo de clase media en la ciudad Buenos Aires tuvo un aumento interanual en julio de 45,7%, según datos de la Dirección de Estadística local.

Las estadísticas porteñas estudian la canasta de consumo de cinco tipos de hogares: el de un joven que vive solo en casa propia, el de un matrimonio joven sin hijos que alquila y el de otro que tiene su casa, el de un matrimonio de jubilados con vivienda propia. y el de una pareja con dos hijos con casa propia y otra también con dos chicos pero que alquila.

Si consideramos a estos dos últimos tipos de hogares, un matrimonio con dos hijos varones de 6 y 9 años y propietario de una vivienda gastó $16.547,17 durante el mes pasado para sostener el mismo nivel de vida que un año atrás ($11.352,10).

Otro familia similar pero sin vivienda necesitó $20.367,90 para conservar el mismo nivel de vida, cuando en 2015 con $14.093,94 le alcanzaba. Es decir, que sus ingresos debieron crecer al menos 44,5% en los últimos doce meses.  Para pagar el alquiler, la dirección de Estadística consideró que esta familia de cuatro integrantes necesitó $3.820,73 mientras que destinó $1.166,92 para las expensas.

Para pagar el alquiler, la dirección de Estadística consideró que esta familia de cuatro integrantes necesitó $3.820,73 mientras que destinó $1.166,92 para las expensas. 

Volviendo a la familia propietaria, con relación a junio se verificó un alza de 2,3% en su canasta de vida. Desde enero se calculó un avance de 31,5%. 

Lo que más afectó las cuentas familiares fue el aumento de tarifas. Por ejemplo, un hogar que en julio del año pasado pagó $54,87 de gas pasó a abonar en 2016 $161,70, lo que representa un alza de 198%.

En el caso de la electricidad el costo fue de $31,98 hace 12 meses contra $112,98 en julio pasado, que implica un ajuste de 261%, mientras que en el caso del agua la factura a abonar pasó de $88,45 a $338,67, un 284% más.

En los alimentos, el gasto de ambas familias pasó de $4.927,82 a $7.162,72, lo que representa un alza del 45%.

Esta canasta de consumo se diferencia de aquellas que miden la indigencia (CBA) y la pobreza (CBT) en que incorporan actividades como esparcimiento y algunos otros insumos de confort.

Asumiendo que el ingreso de la familia de cuatro integrantes que tiene techo propio  estuviese por debajo de los $16.547,17, pero por encima de los $12.979,40 (CBT) en la Capital Federal le alcanzaría para no ser pobre, mientas que manteniéndose por arriba de los $6.524,62 (CBA) mensuales se conservaría por encima de la línea de indigencia. 

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