María Eugenia Vidal no quiere saber nada con la demorada reforma política que impulsa Mauricio Macri. La Gobernadora considera que los cambios en la metodología de votación le podrían hacer perder terreno en las elecciones del año próximo y rechaza un punto clave del proyecto: la boleta única electrónica.

Es que, en paralelo a la gestión, una parte del equipo de Vidal está abocada a afinar la relación con intendentes del interior y el siempre poderoso Conurbano. Las reuniones para sumar alcaldes a Cambiemos son constantes. En los hechos, los pases son escasos, aunque las promesas abundan.

El ex massista Joaquín De la Torre, asumirá el lunes al frente del ministerio de Producción, aunque se sabe que su rol dentro del gabinete tendrá un claro perfil político. Y trabajar para que algunos intendentes se sumen a Cambiemos será uno de los objetivos.

En el entorno de Vidal sostienen que la boleta única electrónica es un traje a medida de Massa, que hoy lidera las encuestas pero no termina de consolidar un polo fuerte de intendentes.

Mientras tanto, la Gobernadora se propuso como meta visitar a los 135 intendentes en su primer año de mandato. Hoy visitó tres distritos de la Cuarta: Florentino Ameghino, General Villegas y Rivadavia.

En el entorno de la Gobernadora sostienen que esas reformas le calzan perfecto a Sergio Massa, el líder del Frente Renovador que se mantiene con muy buena imagen en las encuestas, pero que no termina de consolidar un polo importante de intendentes con manejo territorial.

Massa está en carrera, aunque su candidatura no está confirmada oficialmente, se descuenta que encabezará la lista por su espacio. Sin embargo, Vidal -aunque tiene buenos números en las encuestas- no será candidata y por eso sus asesores más cercanos trabajan a destajo para extender su red territorial como manera de apuntalar una candidatura que no contará con el arrastre de la gobernadora en la boleta.

El líder del Frente Renovador sonríe mientras se acerca la fecha del tratamiento de la ley en el Congreso. Sabe que, con la reforma aprobada, las estructuras territoriales ya no serán necesarias.

Desde el oficialismo sostienen que los únicos capaces de fiscalizar una elección en el Conurbano son Cambiemos y el Frente para la Victoria.

Según pudo saber LPO, Vidal, Jorge Macri y Emilio Monzó le plantearon el rechazo a la boleta única electrónica a Marcos Peña durante una cena. Eran las primeras semanas de gestión del nuevo gobierno y la respuesta del jefe de Gabinete fue contundente: “Esto sale si o si”.

Desde esos sectores del PRO sostienen que hoy el escenario es diferente y se ilusionan en que la reforma se dilate para que no pueda ser implementada el año próximo.

El plenario de comisiones de este jueves tuvo que levantarse por flata de quórum.

Télam

Fue en ese marco de opiniones cruzadas que el oficialismo en Diputados fracasó hoy en su intento de avanzar con el proyecto de reforma política tras postergarse el plenario de comisiones por falta de quórum. Aunque desde el macrismo esperan emitir dictamen en las próximas dos semanas.

La ausencia masiva de los diputados del Frente para la Victoria-PJ y de representantes del propio oficialismo fue determinante para que no hubiese número suficiente en la reunión, por lo cual transcurrida la media hora reglamentaria el presidente de la comisión, Pablo Tonelli, la levantó luego de mostrarse abierto a realizar modificaciones a la propuesta.

Vidal, Jorge Macri y Monzó le plantearon a Marcos Peña en una cena sus reparos con la boleta única electrónica y la respuesta del jefe de Gabinete fue tajante: "Esto sale o sale".

"Estamos analizando y vamos a trabajar en las modificaciones en los próximos días en el proyecto. Seguramente, la semana que viene vamos a tener un proyecto definitivo, si al proyecto del Ejecutivo le agregamos los cambios y modificaciones propuestas y que nos parezcan razonables", explicó Tonelli.

La semana pasada el proyecto de reforma política se discutió en comisiones de la Cámara de Diputados. Allí hubo un rechazo unánime a la imposibilidad de cortar boleta entre diferentes partidos políticos en las primarias y obligar al ciudadano a participar de una sola interna.

Pero también, hubo muchas críticas a la boleta única electrónica por supuestas vulnerabilidades.

En esa reunión, Massa no mostró sus cartas y evitó una definición sobre el tema, aunque, la salida del plenario de una de sus diputadas que había pedido ser oradora alimentó sospechas de un acuerdo entre el oficialismo y el líder de Tigre de no hacer objeciones sobre el tema.