El juez federal Marcelo MartÃnez de Giorgi ordenó la detención de Hebe de Bonafini al declararla en rebeldÃa por no presentarse a declarar por la causa "Sueños Compartidos" en la que está imputada y desató una manifestación del kirchnerismo que se extendió desde Plaza Mayo hasta la sede de las Madres.
Bonafini faltó a la citación a indagatoria que le formuló MartÃnez de Giorgi por lo que quedó expuesta a una orden de detención para llevarla a declarar, la cual fue dictada por el magistrado alrededor de las 15 horas justo cuando comenzaba la habitual ronda de las Madres en la Plaza de Mayo.
Esto generó enorme tensión en la Plaza, donde cientos de militantes acompañaron a la dirigente y otros tantos se convocaron e a través de las redes sociales para ir a protestar contra la orden de detención. "Si nos quieren poner presas, que nos pongan , no les tenemos miedo a estos hijos de mil puta", desafió Hebe.
"Nos podrán poner presas, pero no pueden poner presos el pensamiento, la voluntad y las ganas de pelear", agregó la dirigente, que también denunció que la quieren hacer "desaparecer".
Sin embargo, advertido del escándalo que generarÃa detener a la lÃder de las Madres en la Plaza de Mayo -además del contenido simbólico-, el juez determinó en un principio que la detención no podÃa hacerse en la vÃa pública. Luego de la ronda, cuando Hebe se retiró de la plaza, se conoció que De Giorgi determinó que la detención puede hacerse en cualquier lado.
Más tarde, MartÃnez de Giorgi redobló la apuesta le prohibió salir del paÃs a la presidenta de Madres de Plaza de Mayo.
La tensión comenzó cuando De Giorgi ordenó allanar la sede de la Fundación Madres de Plaza de Mayo, se supone que para llevar a Bonafini detenida, a declarar por la fuerza. Pero un nutrido grupo de militantes impidió el avance policial hasta que las Madres salieron del edificio y se subieron a la camioneta que siempre las traslada a la Plaza de Mayo.
El vehÃculo con Bonafini tuvo que salir por la vereda de la avenida Hipólito Yrigoyen, eludiendo el cerco policial. En ese momento, se produjeron algunas escaramuzas entre los militantes y los efectivos policiales, pero se terminaron cuando la camioneta pudo salir hacia Plaza de Mayo.
La resistencia
El pedido de detención provocó un acto con la liturgia kirchnerista que no se veÃa desde antes del escándalo de José López, que provocó rupturas múltiples en el Frente para la Victoria.
Amado Boudou, Carlos Zannini, Axel Kicillof, Andrés "Cuervo" Larroque y MartÃn Sabbatella fueron las principales figuras del kirchnerismo que se apersonaron en el acto para armar una especie de escudo que impidiera la detención de Hebe.
Mientras en el Gobierno defendieron el pedido de detención, junto a un sector de la izquierda, la manifestación contó con la presencia de dirigentes del FIT, como el legislador Patricio del Corro, y la diputada nacional Myriam Bregman.
En el acto que se improvisó con micrófonos y parlantes frente a la sede de las Madres, Hebe dijo que estaban "felices de estar en la calle, no estemos tristes, afligidos, callados o quietos" y le advirtió al Gobierno nacional que "ya demasiado hicieron en 7 meses, Macri, pará la mano". "Es un momento hermoso para las madres, esto es lo que las madres queremos, un pueblo en la calle, movilizado, feliz", aseguró.
El descargo
Esta mañana, tras confirmarse que no irÃa a declarar, Hebe presentó una carta en la que cuestiona duramente el juez y a "la mal llamada Justicia". "Otra vez sufrimos en carne propia la burla, que nos castiga a todas, ancianas de 85 a 90 años, y nos condena a pagar las deudas, injustas y ajenas", enfatizó.
Tras repasar una larga lista de desencuentros judiciales, Bonafini escribió: "llegó el caso Schoklender, allà las Madres con gran esfuerzo aportamos voluntariamente 60 cajas con pruebas, junto con 40 backup, y otros elementos más". "Primero a Oyarbide y después a usted, que ni siquiera leyeron algo de lo aportado. Asistimos cuantas veces nos llamaron a declarar, hicimos pericias de las firmas que constataron que no eran mÃas, siempre a disposición por la verdad", subrayó Bonafini en la misiva a MartÃnez. "Incluso hace unos meses asistà voluntariamente a su despacho para informarme ante la indigna marcha de la causa", le recordó.
"Siempre la misma ignominia, la misma indiferencia, yo sentÃa como la denominada Justicia era cómplice de los asesinos militares y marinos. Una Justicia sin solidaridad, sin sentir por los otros, sin sufrir por ellos", continúa la carta. "Vamos a luchar para que alguna vez nos enfrentemos con jueces probos que nos ayuden a sentir en nuestros cuerpos el valor de la Justicia", cuestionó.
En tanto, Eduardo Barcesat, que se habÃa presentado como abogado defensor de Hebe, admitió que ese escrito no cumplÃa con las formalidades de una indagatoria y, en consecuencia, la lÃder de las Madres podÃa ser sujeto de una orden de detención. Barcesat indicó también que le habÃa aconsejado que presentara un escrito a modo de declaración espontánea para quedar "a derecho".
Pero Bonafini consideró que no tiene de qué defenderse, rehusó presentarse ante el juzgado y ni siquiera los designó a Barcesat y Antonio Rojas Salinas como abogados defensores particulares, por lo que técnicamente hoy está asistida por un defensor oficial.
