Mauricio Macri y Enrique Peña Nieto se reunieron en la Casa Rosada y el presidente de México confirmó que empezarán las negociaciones para lograr un tratado de libre comercio (TLC), que es una condición para que Argentina pueda ingresar a la Alianza del Pacífico, como había anticipado LPO.

El mexicano celebró el “relanzamiento a la relación” con Argentina a partir de la asunción de Macri y la ampliación del Acuerdo de Complementación Económica (ACE6), y propuso que este sea el primer paso para “un acuerdo de mayor integración y de libre comercio” entre los dos países. "Aspiramos a que estos convenios que firmamos hoy se multipliquen y nos lleven a que tengamos un acuerdo de integración absoluta, de libre comercio entre ambos países", había dicho el argentino minutos antes.

LPO había adelantado que la intención de Peña Nieto era ampliar el ACE6 como primer paso para el TLC y ya había charlas entre los funcionarios de las áreas de comercio de ambos países. El ACE6 rige el comercio entre Argentina y México y establece hasta ahora reducciones arancelarias de hasta 100% en menos del 40% del universo arancelario.

La propuesta de Peña Nieto es de muy difícil implementación, pero revela la intención de Peña Nieto de convertir a la Argentina en su principal aliado en Sudamérica, en la histórica pulseada por el liderazgo regional que Mexico tiene con Brasil.

El TLC es el paso que necesita Macri para que Argentina pueda empezar a cumplir los pasos para su ingreso a la Alianza del Pacífico, de la que es miembro observador desde el mes pasado. Para convertirse en miembro pleno del bloque, Macri debería contar con acuerdos de libre comercio con México, Perú, Chile y Colombia. La propuesta de Peña Nieto es un espaldarazo a las intenciones del argentino.

Se trata sin embargo de un enorme desafío político, porque para alcanzar ese objetivo Macri debería o bien abandonar el Mercosur o lograr que todo ese bloque se sume a la política de libre mercado de los países del Pacífico, un salto con enorme riesgos para la industria argentina y que seguramente resistirá Brasil.

De hecho, como informó la consultora Abeceb el intercambio comercial entre Argentina y México alcanzó un pico deficitario en 2015 por 1001,9 millones de dólares (ver recuadro), lo que anticipa que una apertura total del comercio con ese país que es uno de los más competitivos de la región, podría arrasar con buena parte de la industria local.

El propio ministro de Economía mexicano, Ildefonso Guajardo, había anticipado a LPO en la última Cumbre del Pacífico de Puerto Varas, a la que asistió Macri, que el TLC con Argentina era "un objetivo para pensar a largo plazo", pero que ahora lo importante era concentrarse en ampliar el ACE6.

Por eso, acaso lo más importante del anuncio haya sido lo que no se dijo: En el plano geopolítico la oferta de Peña Nieto, revela la intención del presidente mexicano de establecer a la Argentina como su principal aliado en Sudamérica, para intentar inclinar la balanza en la histórica pulseada que México mantiene con Brasil por el liderazgo de Latinoamérica.

Presidencia

Funcionarios de la delegación mexicana que hoy visitaron la Casa Rosada dijeron a LPO que si bien Argentina no es el socio más importante en Sudamérica, pretenden que lo sea. "Brasil es un desmadre y queremos quedarnos con todo lo que pierde", admitieron los representantes.

Además, consideraron que la visita oficial de Peña Nieto (que será retribuida por Macri el año que viene) es un relanzamiento de la relación muy importante, que se había cortado por completo en el último tramo de la presidencia de Cristina Kirchner.

Brasil es un desmadre y queremos quedarnos con todo lo que pierde, confesaron a LPO integrantes de la delegación oficial que acompañó a Peña Nieto.

"Estamos construyendo una nueva etapa en la relación, con una visión compartida de la ruta que nuestras sociedades deben de tener para alcanzar mayor desarrollo y justicia social", dijo Peña Nieto en la conferencia compartida, confirmado que lo une a Macri la convicción de los beneficios de una economía de base neoliberal y abierta.

Peña Nieto también confirmó el anticipo de LPO de que su gobierno respaldará la presidencia argentina del G20 en 2018. “Deseamos que el G20 se realice aquí en Argentina en 2018”, afirmó el mandatario azteca, lo que implicaría que Buenos Aires presida el bloque. Además, el presidente mexicano adelantó que apoyará “el ingreso de Argentina a la OCDE”.