Un grupo de vendedores ambulantes armaron una protesta con fuego y palos en la puerta del Concejo Deliberante de Morón, luego de que el intendente Ramiro Tagliaferro los desalojara la semana pasada, por vender sin autorización municipal.

Los manteros lograron que la sesión legislativa pasara a cuarto intermedio y hasta se declaró un asueto administrativo para el personal, debido a la toxicidad de la quema de neumáticos.

Hubo tensión en el centro de Morón, ya que algunos de los manifestantes desafiaron a la policía apostada en la esquina del Palacio Municipal. Aunque no pasó a mayores.

Los comercios decidieron cerrar los locales para evitar problemas, en medio de un clima denso y caos de tránsito ya que se interrumpieron las principales calles del distrito.

La manifestación se da luego de que la semana pasada Tagliaferro levantara los puestos de venta callejera y decomisara mercadería, en un operativo con más de 250 efectivos de la Policía Bonaerense.

Los vendedores reclamaron con pancartas pidiendo recuperar sus lugares de trabajo. El alcalde macrista declaró a la prensa que les ofrecieron una inclusión en otros emprendimientos, aportando capacitación, y sostuvo que los manteros por ahora se niegan a reacomodarse e insisten en mantener los puestos en la vereda.

“Este tipo de actividades tienen una fuerte organización mafiosa detrás que busca beneficios irregulares, mediante actividades que no cumplen las normativas vigentes y que perjudican a los comerciantes, que contribuyen con sus impuestos y dándole trabajo a los moronenses”, señalaron desde la municipalidad.