Alfredo Lijo, el hermano del juez Ariel Lijo aparece vinculado en la investigación judicial por presuntos desfalcos por parte de Daniel Scioli hacia el Estado bonaerense.

Es que ‘Freddy’ Lijo fue parte de la administración de Aguas Bonaerenses SA, la empresa distribuidora de agua en varios puntos de la Provincia que presidió Guillermo Scarcella, también complicado en esta causa y sindicado como operador de otro juez federal cercano al ex gobernador: Rodolfo Canicoba Corral.

Según consta en el Boletín Oficial, en julio de 2008 Scioli designó a Lijo como síndico de la empresa estatal. Desde entonces, y hasta el final del mandato del ex motonauta, el hermano del Juez y Scarcella eran mencionados como dos de sus operadores clave en la Justicia.

En la denuncia original que presentó Carrió contra Scioli por enriquecimiento ilícito mencionó a Scarcella, pero no al hermano del juez Lijo. Sin embargo, ya amplió su presentación incluyendo a Freddy.

En la denuncia redactada por Elisa Carrió existen fuertes acusaciones sobre Scarcella, pero no sobre Lijo. Por eso, según pudo saber LPO, desde el entorno de la diputada ya ampliaron esa presentación introduciendo el nombre del hermano del juez federal.

Para el entorno de Carrió, Lijo era “un hombre de Scioli en Comodoro Py” y, junto a Scarcella, tejían el andamiaje judicial y de negocios para Scioli.

Aunque Lijo era un desconocido en La Plata (incluso dentro de la propia empresa) su poder de fuego estaba en el lobby judicial. El periodista Carlos Pagni lo señala periódicamente como el "gestor judicial" que le permitió y le permite al ex ministro de Planificación Julio de Vido, evitarse contratiempos serios en la justicia. Lo asistía en esa tarea José María Olazagasti, mano derecha del ex ministro, devenido en empresario de medios desde que colonizó radio El Mundo.

El ex gobernador Daniel Scioli.

DyN

Pagni reveló en su momento que 13 días después de la masacre de Once, De Vido envió  "Freddy" Lijo a conversar con el juez Claudio Bonadio y juntos se reunieron con un representante de la Procuración.

Como consecuencia de esos trámites, el fiscal Federico Delgado fue retirado de la causa, y De Vido no fue siquiera citado a declarar. Este acuerdo fue luego desbaratado por la Cámara Federal y el juez recibió la orden de incluir al ministro en sus investigaciones.

Cuando Bonadio recibió la indicación ya era otra persona: El kirchnerismo lo había amenazado con armar una causa contra un hijo suyo e intentó destituirlo en el Consejo de la Magistratura. Desde el abismo, Bonadio pidió a ‘Freddy’ Lijo reciprocidad. "De Vido dice que no puede hacer nada", le respondieron.

La denuncia

La denuncia contra Scioli y Scarcella fue firmada por la propia Carrió y se fundamenta en "información anónima". Fue presentada en la UFI 11 a cargo del fiscal Álvaro Garganta.

Carrió advirtió en su presentación sobre hechos que dan cuenta de "un gran desmanejo de los recursos públicos de la provincia", a través de maniobras con "cajas negras" del Estado que "no solo habrían engrosado ilegalmente el patrimonio de los denunciados, sino que el fruto del dinero obtenido podría haber sido ocultado a través de maniobras de conversión, transferencia o disimulación de bienes provenientes de ilícitos penales".

LPO adelantó que el fiscal pidió al Tribunal de Cuentas varias rendiciones de gastos correspondientes a 2015 por 45.696 pesos; 190.000 pesos; 230.000 pesos; 49.100 pesos; 321 mil pesos; 400 mil pesos; dos por 700 mil pesos y otras dos por 900 mil pesos, entre otros requerimientos.

En el caso de pagos efectuados en 2014, Garganta reclama expedientes por 700 mil pesos; 500 mil pesos; 600 mil pesos y otros dos por 1.400.000 pesos, entre otros. Sólo en el caso de la Jefatura de Gabinete, el fiscal puso la lupa sobre erogaciones superiores a los 8 millones de pesos.

En la denuncia, Carrió afirma que los fraudes al Estado bonaerense se cometieron “a través de distintas ‘cajas’ de la administración, y sobre estos delitos que el gobernador podría haber sido autor, participe o encubridor”.