“Vamos para
adelante”. La orden fue clara y concisa. El gobernador Alfredo Cornejo, hace
poco más de un mes, dio indicaciones para “abrir el juego” a la minería,
actividad súper resistida en Mendoza. La razón es simple: los recursos del
Estado son cada vez más estrechos, la recesión y la crisis pasan factura a las cuentas
públicas y la recaudación se desploma mes a mes.
Es por esto que Cornejo ordenó avanzar. Convocar a una ronda de consultas y marcar la cancha a los grupos más reaccionarios a la idea de avanzar en proyectos mineros. La forma será a través de una convocatoria para este miércoles, cuando más de 300 organizaciones de la provincia debatan, con el arbitrio de Gobierno, las ventajas y desventajas de avanzar en la explotación minera.
“Sabemos que la ley 7.722 prohíbe la minería metalífera a cielo abierto, pero nos deja un amplio abanico de posibilidades que vamos a aprovechar”, explican cerca de Cornejo. Es que la llamada “ley antiminera”, promovida por Julio Cobos cuando era gobernador en el 2007 como respuesta al rechazo social al proyecto San Jorge, deja abierta la posibilidad de avanzar en otro tipo de explotaciones.
Y en esto el Gobierno mendocino ha avanzado. Hace pocos días, dio a conocer la realización de un censo minero que incluirá a los yacimientos de segunda y tercera categoría, casi marginales, que de todas maneras puede ser redituables para la Provincia.
Al mismo tiempo, en breve estará listo el trabajo encargado a la consultora española BB&J por parte de Cornejo para saber cuál es la mejor manera de avanzar con el tema minero sin provocar el rechazo de los ciudadanos. Los 13 millones de pesos que le costó a los mendocinos la contratación de esta firma, deberían darle al Gobierno la respuesta a cómo evitar los piquetes, protestas, marchas y escraches que sufrió Cobos en su momento cuando tibiamente apoyó a San Jorge.
Pero más allá de los miedos que pueda tener Cornejo a la reacción popular, ha sido inteligente en cooptar a los más revoltosos ambientalistas colocándolos en cargos públicos. El ejemplo más claro es el del ex titular de la ONG Oikos, Eduardo Sosa, hasta el año pasado feroz crítico de la política ambiental de Paco Pérez y deunciador permanente de “desastre en política ambiental” de la anterior gestión mendocino . Hoy Sosa en jefe de Gabinete de la Seretaría de Ambiente, la responsable del Zoo de Mendoza, lugar donde han muerto más de 70 animales desde diciembre.
Con este contexto, Cornejo confía en haber al menos debilitado el frente ambientalista.
Sin embargo, y más allá de las preocupaciones por el medio ambiente, la realidad provincial es complicada. El último dato del Ministerio de Hacienda da cuenta de que en mayo respecto al mes anterior, la recaudación cayó 4%, y que presentó un 27% de aumento respecto al mismo mes del año pasado, muy por debajo de la inflación anualizada.
Con todo, la convocatoria de este jueves tiene dos objetivos declarados: “Por un lado, poder desarrollar una propuesta de política de Estado para presentarle al Gobernador y, por el otro, construir una herramienta de evaluación objetiva para proyectos que resulten de interés para la provincia, es decir que sean ambientalmente sustentables, que tengan un beneficio económico importante y que promuevan el desarrollo de determinados lugares”, según resumió el titular de la Subsecretaría de Energía y Minería, Emilio Guiñazú.
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ASÍ QUE. OJO... NO VAMOS A BANCAR NADA QUE CONTAMINE LA TIERRA Y EL AGUA... VISTE?
PORQUE VOS Y TU FLIA SE PUEDEN MUDAR A DALVIAN y VIVIR A AGUA MINERAL, PERO NOSOTROS VIVIMOS Y MORIMOS ACA...