Una patota irrumpió en una reunión de vecinos del consejo consultivo de la Comuna 4 de Capital Federal, que debatía la entrega de terrenos de la Ciudad en casa Amarrilla, al Club Boca Juniors para que construya un nuevo estadio.

La patota entró con la deliberada intención de "romper" el debate y en la gresca, atacó a cuchillazos a un militante del Frente para la Victoria -se trataría de Matías Scinica-, quien según las primeras versiones habría recibido un cuchillazo en el cuello, cayendo al piso al instante.

En ese momento intervino Fernando Abal Medina, hermano del senador Juan Manuel Abal Medina, que con los brazos en alto intentó detener las agresiones y sufrió un golpe con un fierro en la cabeza que lo derribó y ya en el piso lo empezaron a patear hasta dejarlo inconsciente.

"Mi hermano ya está fuera de peligro, pero muy golpeado. Le hicimos una tomografía y lo estamos trasladamos del hospital Penna", contó esta noche a LPO, el ex jefe de Gabinete.

El gobierno porteño reaccionó de inmediato: el secretario de Seguridad de la Ciudad, Marcelo D´Alessandro y el vicejefe de Gobierno Diego Santilli se comunicaron con Abal Medina para solidarizarse.

D´Alessandro, en diálogo con LPO, confirmó esta noche que ya se está trabajando sobre la identificación de los agresores, que luego del ataque se fugaron en camionetas. Había cámaras de televisión y más de 200 personas así que las autoridades creen que no será difícil identificarlos.

El kirchnerismo de inmediato atribuyó el ataque a una patota de Boca que respondería al presidente del Club, Daniel Angelici, supuestamente interesado en evitar que se impugnara la cesión de los terrenos que inicialmente estaban previstos para construir viviendas sociales, al club xeneixe.

La investigación está a cargo de la Gendarmería porque desde el 2011 se le dio mediante un decreto presidencial la responsabilidad primaria de la seguridad en el cordón sur de la Ciudad. Esta fuerza es la que se llevó las imágenes registradas por las cámaras.

Fuentes vinculadas al club de la ribera, afirmaron a LPO que si el ataque provino de la barra brava de Boca no fue de la primera línea, porque todos sus dirigentes están en este momento en Paraguay, lidiando con la detención de varios de sus integrantes, acusados de causar incidentes cuando fueron a ver a Boca por la copa Libertadores.

Por otro lado, fuentes del gobierno porteño no descartaban que la pelea estuviera vinculada con "peleas barriales" y mencionaban una situación complicada con gente del barrio Zavaleta.

El presidente del consejo de la Comuna 4, el macrista Héctor "Negro" Apreda, no estuvo presente en la reunión porque se encuentra fuera de la Ciudad.

El presidente de Boca, Daniel Angelici.

Télam

El proyecto de Angelici

Angelici, como reveló LPO en su momento,  quiere construir un estadio-shopping que costará entre 300 y 400 millones de dólares y estará ubicado en los terrenos de Casa Amarilla que la Ciudad le vendió a una suma exigua.

Boca se quedó así con tres hectáreas que pertenecen están ubicadas en el barrio de La Boca, entre las calles Blanes y Espinosa, y entre Palos y Almirante Brown, a metros de la Bombonera. Pagó por esa enorme franja 180 millones de pesos (apenas 6 mil pesos el metro cuadrado) y con la declarada intención de construir un espacio “recreativo para los vecinos”.

Pero en el mundo boquense es sabido que Angelici quiere construir un estadio de última generación de 80 mil butacas, con shopping y restaurantes incluidos, al estilo de los estadios norteamericanos.

El proyecto sin embargo, es rechazado tanto por vecinos de La Boca, que reclaman que los terrenos se usen para construir viviendas sociales, como por hinchas del club que no quieren que la mítica Bombonera donde juega Boca quede en el olvido.

Por eso, Angelici propone lanzar un plebiscito entre los hinchas para que definan si están a favor o en contra de la iniciativa.