Julio Garro, el intendente macrista de La Plata, le entregó el manejo de los medios y la pauta oficial a un periodista ultrakirchnerista y desató la bronca del Gobierno nacional.

En Casa Rosada no pueden creer la maniobra de Garro, que nombró a Martín Musciatti en la dirección de prensa del municipio de la capital provincial.

Musciatti es sobrino de Julio Alak, el ex ministro de Justicia de Crsitina Kirchner y era hasta antes del cambio de gobierno corresponsal de la agencia oficial Télam, manejada hasta ayer por La Cámpora.

Cercano a “la orga” creada por Máximo Kirchner, Musciatti hizo campaña por la ultracristinista Florencia Saintout en contra de Pablo Bruera, el ex intendente que en los últimos años fue prácticamente el blanco exclusivo del portal Infoplatense que el sobrino de Alak dirigió antes de convertirse en funcionario del PRO.

Justamente a través de ese portal, Musciatti fue muy crítico de los negocios del dueño del diario El Día, Raúl Kraiselburd, muy cercano a la gestión Bruera en los últimos ocho años y uno de los más poderosos empresarios platenses. Por esta razón, la relación entre Garro y el dueño del diario más leído de la ciudad de las diagonales está en punto muerto por el momento.

El vínculo de Garro con Alak no es nuevo. Durante el mandato del ex ministro de Justicia en la capital bonaerense, Garro fue vicepresidente de La Plata Fútbol Club, un club que inventó Alak para usar el Estadio Único y competir con Estudiantes y Gimnasia pero que no pudo llevar a la Primera División.

En tanto que luego del triunfo de Bruera sobre Saintout en las primarias de agosto, en el bruerismo acusaron a Alak de juntarle fiscales a Garro pese a que competía contra el candidato del Frente para la Victoria.