Cristina Kirchner empieza a despedirse de la militancia a unas dos semanas de dejar el poder. Hoy apareció por primera vez luego de perder el domingo la segunda vuelta con Mauricio Macri, a quien le apuntó veladamente durante su discurso, aunque también convino en mostrarse como una "oposición constructiva".

La Presidenta encabezó un acto por la remodelación y expansión del Hospital Posadas, con videoconferencias en Esteban Echeverría, Ituzaingó y Paraná. 

"Vamos a colaborar, no vamos a dejar sin presupuesto" al gobierno del PRO, dijo en uno de los mensajes más conciliadores con el Presidente electo. "Nosotros vamos a ayudar sostener las instituciones, la gobernabilidad. Porque cuando éstas se rompen, los que más sufren son los de abajo", sostuvo Cristina.

"No vamos a hacer las cosas que nos han hecho a nosotros. Porque el peronismo ha sufrido persecuciones, negaciones, proscripciones, como ningún otro partido de la Argentina. Y en nombres de esas tragedias, jamás se nos ocurrirá hacer algo que dañe la gobernabilidad o la convivencia de los argentinos", agregó la Presidenta, siguiendo ese tono. 

Pero Cristina no demoró en ponerse picante, cuando recordó el resultado de la segunda vuelta en que su candidato perdió por menos de 3 puntos.  

"¿Qué hubiera pasado si nosotros ganábamos por un margen tan pequeño?", chicaneó la mandataria y se preguntó si "¿la oposición "hubiera reaccionado con la grandeza con que lo hizo el kirchnerismo?". 

Las declaraciones de Cristina se dan luego de que ayer recibiera en Olivos al presidente electo, Mauricio Macri, en un breve encuentro que según el líder del PRO no sirvió para nada. 

La líder del FPV hizo una larga defensa de su gestión y, entre otras cosas, destacó que "entramos sin industrias y nos vamos con un país con industrias en marcha dándole trabajo a millones y millones de argentinos". 

 La Presidenta destacó, además, que durante los 12 años de gestión el kirchnerismo "ha empoderado al pueblo en sus derechos", por lo que consideró que serán los ciudadanos quienes "deberán defenderlos si alguien se atreve a querer arrebatárselos".

"Allí estaremos junto a ustedes, defendiendo las conquistas logradas y reconociendo esta siembra de conciencia nacional, popular y democrática que hemos sembrado", sostuvo. 

En lo que fue una crítica ya obsoleta a Macri, Cristina le advirtió al presidente electo que "un país no es una empresa".

"Que nadie se confunda", apuntó la presidenta saliente. "Un país no es una empresa, es una nación conformada por hombres y mujeres con diversidad, con necesidades que deben ser cubiertas, no con un criterio economicista o de balance", alertó Cristina.