La decisión de Ernesto Sanz de rechazar el Ministerio de Justicia abrió la puerta a una feroz interna entre las líneas judiciales del PRO, que ya descartan que Mauricio Macri le vuelva a ofrecer la cartera al radicalismo y pelean por quedarse con ese lugar.

Quienes ya se anotaron para reemplazar a Julio Alak son el fiscal general de la Ciudad de Buenos Aires, Martín Ocampo, y de su antecesor en ese cargo, Germán Garavano.

El ex legislador Ocampo pertenece a la línea que encabeza Daniel “Tano” Angelici, operador judicial de Macri, presidente de Boca y también candidato a quedarse con el control de la Agencia Federal de Inteligencia, la ex Side.

En tanto, Garavano responde a la línea del PRO denominada CPC (Compromiso Para el Cambio), integrada por José Torello –apoderado del PRO y amigo de la secundaria de Macri- , Pablo Clusellas –secretario legal y técnico de la Ciudad-, Fabián “Pepín” Rodríguez Simón y Mauricio Devoto, dos operadores judiciales.

Esta línea estuvo históricamente enfrentada al ala que encabeza Angelici y quedó golpeada cuando el Tano impuso a Ocampo en la Fiscalía General, al punto que buscaron limar al ex legislador cuando éste borró del Ministerio Público a la gente de su antecesor.

El nombre de Garavano empezó a sonar fuerte días atrás, cuando Sanz empezó a hacer trascender que no aceptaría el Ministerio de Justicia. Incluso, el senador radical le hizo saber personalmente que no se preocupara por él. "Quedate tranquilo que yo no quiero ir a Justicia", le dijo. El ex Fiscal General tiene a su favor que habla todas las semanas con Macri, el que tiene la decisión final.

En el caso de Ocampo, al parecer le juega en contra una bajada de línea de Macri contra los que buscaron asegurarse el futuro con cargos, desconfiados de que el jefe de Gobierno lograra la presidencia. "Los que agarraron cargos antes, ahora no vengan a pedir", fue la orden. Ocampo se aseguró la fiscalía general el año pasado, con un mandato de siete años.

Ocampo y Angelici también buscan ganar quedarse con la cartera de Justicia y Seguridad porteña, que dejará libre Guillermo Montenegro para irse a Seguridad de Nación. Una de las ideas que circula en el macrismo es desdoblar la cartera porteña, con lo que el Tano apostaría a quedarse con la judicial.