Mauricio Macri dejó en claro que si llega a ser presidente soltará con fuerza el dólar oficial. El candidato a presidente por Cambiemos retomó las ideas que vienen planteando los economistas del PRO y aseguró que los productos tienen incorporado el valor del blue, por lo que una devaluación no impactaría en los precios.

En un extenso reportaje concedido al periódico El Tribuno, de Salta, el jefe de gobierno porteño blanqueó que su idea es llevar al billete verde al precio que tiene en el mercado paralelo, aunque “espera” que pueda ubicarse debajo de esa cifra.

“Alfonso Prat Gay confirmó que si usted es presidente el dólar oficial va a subir de precio pero que bajarían los otros. ¿no teme que ese incrementó del dólar oficial dispare aún más a la inflación?”, le preguntó el periodista Hugo Krasnobroda.

La respuesta de Macri fue contundente: “No, los costos ya están en el dólar de 16 (pesos). Andá a ver cuánto valen las cosas. Los productos tienen el equilibrio del dólar de 16”.

“Lo que nosotros debemos lograr es un único tipo de cambio que genere nuevamente la confianza y la expectativa para que el productor se ponga a invertir, a producir, a generar trabajo y a exportar. Esperemos que ese dólar esté por debajo de los 16 pesos”, dijo, al parecer no demasiado preocupado por los resultados de esa devaluación ni del punto exacto en que se podría ubicar la divisa.

Hasta ahora, el líder del partido amarillo sólo había mencionado que en su eventual gobierno el tipo de cambio lo fijaría el mercado, aunque había evitado detallar a qué valor pensaba llavarlo.

Aunque ayer Macri insinuó que en enero la divisa iba a costar más que diez pesos, saliendo al cruce de la promesa de su rival oficialista, Daniel Scioli. "Otra mentira más del Gobierno que va a destruir la Argentina. El dólar que promete Scioli en enero no lo consigue nadie", disparó el alcalde porteño.

El “sinceramiento” del tipo de cambio es una discusión que hace un tiempo atraviesa la campaña. En el PRO aseguran que el grueso de la futura devaluación ya se absorbió porque los productos transables se habrían movido en sintonía con el blue, y además estaría acompañada de un plan económico consistente.

Como reveló LPO, en el PRO había molestia con los economistas del espacio porque cada vez que hablaban complicaban la campaña. De ahí lo llamativo de las declaraciones de Macri en donde hace una referencia tan explícita el tipo de cambio que espera tener en su eventual gestión.

La semana pasada, Prat Gay sostuvo que el dólar oficial iba a subir, pero los otros tipos de cambio iban a bajar, sirviéndole en bandeja al kirchnerismo un argumento para destrozarlo, en el marco de las acusaciones del oficialismo de que el macrismo aplicará una dura devaluación si llega a la Casa Rosada.

Además, se difundió un bochornoso video del ex presidente del Banco Central en el que se lamenta porque la Argentina cada diez años se deja “cooptar por caudillos que vienen del norte o del sur, de provincias con muy pocos habitantes y currículum casi desconocido”.

También Carlos Melconian hizo lo suyo. Tras mantenerse guardado durante un tiempo, el consultor reapareció para un debate con Gustavo Marangoni y levantó polvareda cuando advirtió que ya no se podían seguir subiendo los salarios y las jubilaciones.

En ese sentido, el encargado del área energética, Juan José Aranguren, puso en duda que YPF siga en manos del Estado.

Lo cierto es que los economistas oficialistas disienten con la postura del macrismo respecto al efecto de una devaluación. El jueves pasado, el asesor económico de Daniel Scioli, Miguel Bein, se refirió al tema: “un dólar a $16 se llama que la economía el año que viene cae 7% y el consumo popular 10, 12 puntos”.

El ex viceministro de Economía consideró que "es completamente falso" que los precios de productos de consumo masivo y los insumos difundidos están fijados con al valor actual del dólar blue.

El titular de Bein y Asociados subrayó que el equipo económico que acompaña a Mauricio Macri dice "esa barbaridad para justificar el shock" devaluatorio. Y agregó que así pretenden afirmar que "que con la devaluación brusca no se va a perjudicar a nadie que el aceite, el azúcar, la harina, las galletita, los fideos, el pollo, la carne, el arroz, no van a subir de precio cuando muevan el dólar a 15 o 16".

"Ningún precio de insumos difundidos siguió al precio del dólar paralelo, ni el acero, ni el aluminio, los plásticos, los fertilizantes, los herbicidas, la semilla de maíz, la de soja", sentenció.