Mauricio Macri encabezó un acto por el séptimo aniversario de la Policía Metropolitana y anunció que si le gana el ballotage a Daniel Scioli traspasará la Policía Federal a la Ciudad de Buenos Aires, gobernada por Horacio Rodríguez Larreta.

El líder del PRO, exultante por las expectativas del mundillo político que le auguran grandes posibilidades de ser el próximo presidente, dijo que la institución tiene por delante “una enorme tarea”, porque muy pronto se va a “agrandar la familia para recibir a parte de la Policía Federal”.

Primera aclaración, obvia pero que vale la pena señalar. Cuando Macri habla de traspasar la Federal se refiere a los cerca de 5 mil efectivos que cumplen funciones en las 54 comisarías de la Ciudad, y no a los restantes 25 mil oficiales dispersos en el resto del país.

Legalmente no habría impedimentos, el artículo 7 de la Ley Cafiero que obstaculizaba el traspaso fue modificado en 2007, por lo que la Ciudad tiene potestad para hacerse cargo de esta área. Lo que faltó hasta ahora fue “voluntad política”, señalan fuentes del PRO ante la consulta de LPO. Pero de llegar Macri a la presidencia, se descuenta que se pueda realizar.

Además de los efectivos, y este es el punto principal, lo que se traspasa son los recursos económicos previstos para que la Federal lleve adelante sus funciones en la ciudad. Todos los bienes ya sean muebles e inmuebles, desde caballos hasta móviles policiales y comisarías.

Implica también el traspaso del equipamiento de los efectivos, sus armas, su vestimenta, la nafta de las patrullas, es decir, las partidas con las que se ponen en la calla a estas fuerzas policiales.

Macri apunta a que la Federal se adapte a la Metropolitana y no al revés, desde el sistema de comisarías que tiene la fuerza de la Ciudad, hasta el entrenamiento y equipamiento de la misma.

En ese sentido, el candidato presidencial habló hoy de “un doble desafío, porque ellos también tienen que imbuirse de esta mística, este orgullo de pertenecer, de estar cerca de aquellos a los que uno sirve y de saber que la gente confía en uno”.

Macri participó de su primer acto de gestión luego de las elecciones del domingo, con una ceremonia en la Usina del Arte, del barrio de La Boca, donde estuvo acompañado por Larreta; el ministro de Justicia y de Seguridad, Guillermo Montenegro, y el titular de la Metropolitana, Horacio Giménez, entre otras autoridades.

La Policía Metropolitana “es una criatura en la que hemos puesto mucho amor, dedicación y entusiasmo”, apuntó Macri.

Subrayó que haberla transformado en realidad demuestra que “se puede construir una organización humana que tenga como elemento central ese valor que tenemos que recuperar en todos los servidores públicos de la Argentina, que es la mística de sentirse responsables y orgullosos de la tarea que se hace”.

La Policía Metropolitana está compuesta por más de 5.800 agentes y este año se graduará su sexta promoción y se incorporarán 600 nuevos efectivos formados íntegramente en el Instituto Superior de Seguridad Pública.

Está presente en tres comunas, la 12 (Saavedra, Coghlan, Villa Urquiza y Villa Pueyrredón); la 15 (Chacarita, Villa Crespo, La Paternal, Villa Ortuzar, Parque Chas y Agronomía), y la 4 (Barracas, Parque Patricios, Boca y Nueva Pompeya).

Además, presta servicios especiales en el Metrobus y la red de subtes, el Microcentro, Retiro y el Parque Indoamericano, entre otras tareas.