A pesar de que hace varios días que no se registran lluvias en la zona del Salado, la crecida de ese río apenas comenzó a ceder y todavía hay rutas cortadas y casas con el agua al techo en el distrito de Lezama. En tanto, se especula con la posibilidad de perder unos 370 mil terneros y 300 mil hectáreas de trigo.

Esta mañana, el secretario de Servicios Públicos de Lezama, Daniel Bonifacin, afirmó que los lugares que están inundados “son zonas inundables siempre, la ciudad no corre ningún riesgo. Es zona que históricamente, siempre un poco más o un poco menos se inundó”.

"No obstante, la cantidad de agua en la zona es importante", aclaró Bonifacin e indicó que aún no está habilitado el ingreso de camiones a la ruta 57, que une Lezama con Pila.

Según informó el funcionario quedan al menos 27 evacuados y autoevacuados en el paraje El Destino de ese distrito y también se registran algunos en las zonas rurales. "Somos optimistas y estimamos que, si no llueve, el agua bajará en el transcurso de uno a dos meses", concluyó.

El jueves pasado, el caudal del río Salado alcanzó su pico máximo en la ciudad de Lezama, y su desborde dejó una treintena de familias evacuadas y otras tantas aisladas en la zona rural.

En tanto, el tránsito en las rutas 50 y 41 y en el acceso a la localidad bonaerense de Villanueva continuaba cerrado, mientras que en las rutas 29 y 65 la circulación se encontraba afectada por la presencia de agua en las banquinas, informó la Dirección de Vialidad provincial.

La ruta 50 permanece cerrada al tránsito en el tramo que va de Vedia hasta Arenales, la ruta 41 en el tramo de General Belgrano a San Miguel del Monte y el acceso a Villanueva, en el partido de General Paz, en toda su extensión.

En tanto, la ruta 65 entre Junín y General Viamonte y la ruta 29 en distintos tramos de su traza, presentan banquinas inestables por el agua cumulada y la presencia de animales sueltos, por lo que se solicita circular con precaución.

Millonarias pérdidas

La Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) estima una pérdida de 370 mil terneros y 300 mil hectáreas de trigo en la Provincia. Los datos se deprenden de un informe que abarca las zonas del noroeste, centro y sudeste bonaerense, así como la cuenca inferior del río Salado, la más afectada por estas horas debido a la imponente masa de agua que baja por ese curso -hacia su desembocadura en la Bahía de Samborombón- desbordando hacia los distritos aledaños.

Es especialmente en esa parte de la cuenca, zona de cría por excelencia, donde se concentra el grueso de los 370 mil terneros perdidos.