Luego del explosivo informe de Periodismo para Todos sobre el supuesto vínculo de Aníbal Fernández con el narcotráfico de efedrina, y tras las críticas que recibió por parte del Jefe de Gabinete, Graciela Ocaña sostuvo: “Aníbal está molesto porque yo dije que en la causa aparece un teléfono que mantiene comunicaciones con Martín Lanatta que está a nombre de Aníbal Fernández”. 

Y agregó: “Aníbal dijo que era parte de una flota de teléfonos que él no usaba y que usaba otra persona, y no pudo explicar quién era”.

En diálogo con La Once Diez/Radio de la Ciudad, Ocaña no descartó que detrás de la acusación pueda estar la interna del PJ bonaerense pero pidió “que se investigue hasta las últimas consecuencias”. “Aníbal Fernández agravia y pide colocar esta denuncia en el marco de una interna política. Yo no descarto que pueda ser así, pero tampoco lo confirmo. Acá la cuestión es la información de fondo”, manifestó.

Asimismo, la legisladora porteña recordó que en la causa por el triple crimen “aparece la mención por varios testigos de ‘La Morsa’, quien habría cobrado dinero por protección política y policial, que ocuparía un alto cargo en el Gobierno”. 

Y añadió: “Ayer con el testimonio de Martín Lanatta ese lugar lo ocupa Aníbal Fernández, algo que en círculos judiciales se sospechaba pero no había elementos suficientes para imputarlo”.

Por último, Ocaña dijo que el ex intendente de Quilmes “debiera dar explicaciones” y “debe presentarse ante la Justicia”.