Oscar Aguad responsabilizó al intendente de la capital cordobesa, el también radical Ramón Mestre, por su derrota contra Juan Schiaretti en la elección de ayer.

"Si hubiéramos ido todos juntos yo sería el gobernador de Córdoba", afirmó el diputado radical en critica a la decisión de Mestre de convocar los comicios locales para el 13 de setiembre.

En Córdoba es conocida la buena relación entre el alcalde de la capital y el gobernador. Aguad la dejó clara.

El diputado se jactó además de que "De la Sota sabía que era una elección difícil y estuvo especulando hasta último momento", pero aclaró que "esto ya es historia, a llorar al campito. Habría que tener una fecha fija para las elecciones, hacer una ley de las primarias y obligar a que haya debate".

Según pudo saber LPO, el cordobés también está molesto con Ernesto Sanz, porque ni siquiera se pegó una vuelta por Córdoba y no logró que el PRO aportara más que la imagen de Macri.

“No tienen fiscales en ningún lado y cuando salís por la provincia te quedas solo”, le dijo a LPO un dirigente radical de Córdoba, que ayer fiscalizó para Aguad.

Sanz también había expresado su bronca porque Mestre no se comprometía en la campaña. No logró cambiar nada. 

La falta de apoyo contribuyó a que Aguad no pudiera evitar un desprolijo escrutinio provisorio, tercerizado a una empresa venezolana y con demoras que nadie explicó.

Sentido, Aguad anticipó que en las próximas elecciones trabajará para la implementación del voto electrónico.

"Voy a ver si en la próxima elección a legisladores nacionales, que si bien es de la Nación, podemos llegar a un acuerdo para implementar el voto electrónico y ya para los próximos comicios a gobernador se haya implementado en una gran porción", dijo.

Con el 97,23 por ciento de las mesas escrutadas, Juan Schiaretti se imponía con el 39,86 por ciento de los votos, seguido por Aguad con el 33,78 por ciento, y en el tercer lugar se ubicaba el kirchnerista Eduardo Accastello con el 17,2 por ciento.