El paro de docentes que encabezaron las seccionales disidentes de Suteba y auxiliares de educación de ATE se sintió fuerte hoy, incluso en distritos controlados por el secretario general, Roberto Baradel.

Según fuentes gremiales, la medida de fuerza alcanzó un acatamiento del 90% en seccionales opositoras como La Plata, La Matanza, Tigre, Ensenada, Quilmes y Bahía Blanca. En tanto, en las seccionales controladas por Baradel la protesta se sintió muy fuerte alcanzando un 60% en Esteban Echeverría, San Martín, Tres de Febrero y Florencio Varela.

La protesta de hoy es la continuidad de una serie de medidas de protestas que se inició el 10 de abril cuando unos 700 docentes de Tigre no habían cobrado su salario. Por esos días se inició una serie protestas que incluyeron cortes en la autopista Panamericana. Baradel -lejos de contener a los maestros- aseguró que la protesta de los docentes de Tigre es "una iniciativa político partidaria”.

LPO adelantó semanas atrás que el líder de Suteba vive momentos difíciles. Viene de partir el poderoso Frente Gremial Docente tras aceptar una paritaria cuestionada por el resto de los sectores sindicales. Además, dejó de tener línea directa con el gobierno nacional y ahora los maestros de Tigre lo acusan de traición por abandonarlos en el conflicto salarial que mantienen con la Provincia.

El retraso en el pago a los docentes de Tigre generó un creciente malestar en el resto de las seccionales de Suteba opositoras a Baradel que derivó en el paro el 30 de abril. Más tarde, el 15 de mayo otra medida de fuerza se extendió de los distritos combativos a los aliados a Baradel.

Allí se sumaron los auxiliares quienes reclaman el pase a planta de unos 2 mil trabajadores precarizados, bonificaciones para sectores puntuales de la administración pública y nombramiento de personal en áreas críticas.

“Baradel viene teniendo el mismo discurso que Nora De Lucia, atacó nuestro reclamo y dijo que era una protesta partidaria. Ahora se transformó en un ministro de Scioli. Es un carnero y alcahuete del Gobernador”, dijo a LPO Ariel Iglesias, secretario de Organización del Suteba La Matanza.

El líder docente, era un incondicional del gobierno nacional y un crítico acérrimo de Daniel Scioli. Pero la política y el sindicalismo es muy volátil. Hoy, en la Rosada nadie atiende sus llamados. La relación comenzó a enfriarse luego que Cristina Kirchner cargara contra los docentes en su discurso de apertura de sesiones de 2012. “Tienen jornadas laborales de 4 horas y 3 meses de vacaciones. Cómo es posible que sólo tengamos que hablar de salarios”, disparó la Presidenta frente a senadores y diputados.

Eso cruzó a Stella Maldonado, la entonces titular de CTERA. Baradel quedó entre las cuerdas, creció en su carrera gremial de la mano de Maldonado. Las puertas de la Rosada se cerraron y con eso se cancelaba la posibilidad de una soñada candidatura.

Las paritarias de febrero sirvieron para que Baradel sellara su cercanía a Scioli. No dudó en aceptar la oferta del gobierno provincial mientras que la Federación de Educadores Bonaerenses, la rechazaba de plano. Ambos gremios siempre habían mantenido posturas similares durante la negociación, eso hizo del Frente Gremial una poderosa herramienta de negociación que esta vez quedó partida.