Martín Insaurralde está a punto de declinar su candidatura a gobernador de la Provincia de Buenos Aires. Lejos de darse el “baño de humildad” que pidió Cristina Kirchner, el intendente de Lomas de Zamora tomaría la decisión de bajarse a regañadientes a sabiendas que la Casa Rosada hará todo lo posible para bloquear su postulación, si insiste en presentarse.

Hasta ahora, Insaurralde mantenía como único sostén a Daniel Scioli, con quien hoy se mostrará en Lomas de Zamora. La semana pasada, el mandatario bonaerense había mandado a su hermano Nicolás respaldar al marido de Jésica Cirio, en medio de presiones de la Rosada para que baje su candidatura y vaya por la reelección en su distrito.

Pero Scioli ya no tiene margen para sostener su respaldo a Insaurralde. Aunque la foto de esta tarde podría ser leída como un nuevo espaldarazo, lo cierto es que también podría ser la ocasión para que el lomense anuncie que se queda en su pago chico. En La Plata creen que es una buena oportunidad para que lo haga.

A pesar de esta idea, Scioli no le pidió a Insaurralde que se baje. Según pudo saber LPO, lo que sí le avisó es que los candidatos a gobernador en la provincia de Buenos Aires los definirá Cristina, que él no tendrá poder de decisión. Fue una forma elegante de recomendarle que se dé el baño de humildad.

Cristina pretende que haya dos candidatos a gobernador (la idea es que sean Aníbal Fernández y Julián Domínguez) y en las últimas semanas logró una depuración importante. Los más difíciles de bajar siguen siendo Insaurralde y Fernando Espinoza, mientras que Sergio Berni ya avisó que hará lo que pida la Presidenta y podría ser vice de alguna de las fórmulas.

Mientras tanto, como reveló LPO, la mandataria mantiene vivas las especulaciones sobre una posible candidatura suya a la gobernación bonaerense, un lugar desde donde podría arbitrar la boleta del Frente para la Victoria. Uno de los promotores de esa versión es Aníbal Fernández, que jugó fuerte en la depuración de los candidatos. 

Espinoza resiste

Mientras tanto, el otro alentado por Scioli en la carrera por la gobernación, Fernando Espinoza, sigue resistiendo las presiones de la Casa Rosada para que se baje y vaya por la reelección en La Matanza, donde el Gobierno quiere una cara que le garantice los votos del distrito más populoso del país.

Espinoza está molesto con esas presiones y sigue diciendo que no se baja de su postulación. En una muestra de su poderío y capacidad de movilización, el intendente aportó muy fuerte para que Cristina colmar la plaza en los festejos por el 25 de mayo. Según informaron desde su espacio, fueron 22 mil las personas que trajo desde La Matanza.  

Espinoza con Gustavo Arrieta en Cañuelas

Ayer, Espinoza estuvo en Cañuelas con Gustavo Arrieta y ratificó sus intenciones. "Yo me siento un par de mis compañeros intendentes. Más que gobernador quiero ser el coordinador de mis compañeros que tienen la responsabilidad de conducir un distrito, porque con ellos es con quienes se construye la verdadera transformación y el progreso", arengó.

Arrieta hizo explícito su respaldo al matancero. "Queremos que un intendente, uno que ha tenido y tiene la responsabilidad de gobernar el distrito más importante de la provincia y de todo el país, que convirtió a La Matanza en la capital nacional de la producción y del trabajo, sea quien continúe la tarea de transformar a la provincia de Buenos Aires. Felicito a Fernando Espinoza además por su gran tarea como presidente del PJ bonaerense, desde donde nos conduce a través del diálogo y la participación, y le digo que nos sentimos orgullosos de que sea nuestro candidato a gobernador", afirmó.