Julián Domínguez sumó a su campaña a gobernador a Alberto España, diputado provincial y tío de Eduardo “Wado” De Pedro, secretario general y mano derecha de Cristina Kirchner.
Oriundo de Mercedes, como su sobrino, España es un reconocido empresario molinero y Domínguez lo frecuentó en su época de ministro de Agricultura y Ganadería de la Nación.
Consagrado Wado de Pedro como líder camporista, en 2011 fue ubicado como candidato a diputado provincial por la primera sección electoral.
Sin mayores ambiciones, no tuvo problemas en adaptarse a la sombría Legislatura bonaerense. Su clave fue tal vez quedar al margen de las internas entre camporistas y pejotistas.
Hábil, creó un vínculo con la gobernación y muchos creen que podría ser el nexo entre Domínguez y Scioli. Hace un tiempo que el diputado dejó de pegarle al gobernador.
Por gestión de la Casa Rosada y del propio Wado, hace un mes que se sumó a la campaña de Domínguez. Su tarea es aportar ideas, contactos y proponer actividades.
De Pedro supo hacer buenas migas con el presidente de Diputados, quien le respetó cada mensaje que trajo de la quinta de Olivos.
Fue el camporista, por ejemplo, quien definió los secretarios parlamentarios, que fueron Gervasio Bozzano entre 2011 y 2013 y Lucas Chedrese hasta la actualidad.
España se sumó a otra figura con historia en las tertulias de Olivos que trabaja en la campaña de Domínguez: Enrique “Pepe” Albistur, primer secretario de Medios de Néstor Kirchner.
Otra figura que suele tener silla asegurada en los actos de la Rosada y participa de la campaña de Domínguez es Marcelo Fernández, jefe de la Confederación General Económica (CEPBA).
Pepe y Albistur suelen pulsear por lugares en la agenda, pero el diptuado resuelve esas discusiones organizando sus actividades él mismo. Su límite, sabe, es cualquier cosa que pueda enojar a Cristina.
Por favor no corte ni pegue en la web nuestras notas, tiene la posibilidad de redistribuirlas usando nuestras herramientas.