El viceministro de Justicia de la Nación, Julián Álvarez, aparece nuevamente salpicado por un escándalo de barrabravas, algo que ya le había sucedido a comienzos de año con un crimen en la hinchada de Lanús y que ahora se repite con el resonante caso de Adrián "El Panadero" Napolitano, el hincha de Boca que tiró gas pimienta a los jugadores de River.

El vínculo de Julián Álvarez con el caso de "El Panadero" es el abogado Javier Gastón Raidan, quien logró que el hincha sea eximido de prisión antes de presentarse declarar. Raidan es un conocido en el ambiente penal, donde se lo menciona como habitual defensor de policías bonaerenses. De hecho, fue defensor de efectivos acusados por los crímenes de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán.

Pero el dato clave es su cercanía con Álvarez, a quien conoce de Lanús, donde el camporista aspira a ser intendente. El funcionario impulsó (y financió según opositores) el año pasado a Raidan como Director Titular de la Caja de Previsión de la Caja de Abogados, como representante del departamento judicial Avellaneda – Lanús.

En ese momento, Libres del Sur arremetió contra el viceministro por impulsar a Raidan. “Desde lo simbólico y lo político es lamentable que Julián Álvarez pisotee la memoria y la lucha por la justicia de aquella terrible masacre. A esta altura el kirchnerismo ya no sorprende con decisiones como estas”, denunció Isadora Fiesta, referente de Libres del Sur.

En Twitter, Raidan no oculta su cercanía con Álvarez. En su cuenta se dedica a retuitear todos los mensajes del viceministro (también de su jefe político Eduardo “Wado” de Pedro) y también de cuentas dedicadas a difundir la campaña del camporista para la intendencia de Lanús, donde quiere desbancar al intendente Darío Díaz Pérez.

Alejandro Fantino recordó en radio La Red el caso en el que el vínculo de Álvarez con Raidan y barrabravas quedó más expuesto. Una nota del diario Perfil de enero reveló el lado político del crimen del barra de Lanús Alejandro Fernández, alias “el Gallego Popeye”, involucrado en una lucha de facciones por el control de la tribuna del club granate.

“La investigación está sacando a la luz los vínculos políticos de los barras. Y las derivaciones alcanzaron al viceministro de Justicia, Julián Álvarez, cuyos carteles de campaña fueron descubiertos en el baúl del automóvil de uno de los detenidos”, decía el diario.

El acusado -y detenido- por ese crimen fue Gabriel Soto, padre de “El Polaquito”, líder de una facción disidente de la barra. En el auto de Soto padre, la Policía encontró afiches y carteles de la campaña de Julián Álvarez, aunque en su entorno se encargaron de negar que trabaje para ellos.

El auto del barra de Lanús con los carteles de Julián

Lo mismo hicieron con una versión que indicaba que “El Polaquito” era empleado del Ministerio de Justicia. Según Perfil, Soto “no se encuentra dentro de la planta, pero trabajaría para un ‘ente cooperador’. Se trata de organizaciones privadas que emiten formularios oficiales. Los fondos de los entes cooperadores son una de las cajas políticas más difíciles de controlar, a pesar de que en los hechos están bajo el control del Ministerio”.

Otro detenido en el caso -luego liberado- fue Juan Soto, hermano del principal acusado. El defensor de Juan Soto no era otro que Raidan.

Julián Álvarez con Alejandro Marón, presidente de Lanús

Pero la vinculación de Álvarez con la hinchada de Lanús va mucho más allá de ese caso. Es que una de las facciones estaría trabajando activamente en la campaña del dirigente kirchnerista, mientras que otro sector es cercano al massista Nicolás Russo, ex presidente del club.

El caso de "El Panadero" ya había salpicado a otro sector del kirchnerismo. Es que Napolitano había integrado la agrupación del veterano dirigente peronista Roberto Digón, una de las patas del gobierno en Boca. La agrupación de Digón está aliada a la de Víctor Santa María y Santiago Carreras. Éste último, senador bonaerense e integrante La Cámpora, desembarcó en el club hace apenas unos años como parte del intento del Gobierno de sacar al macrismo. Carreras es, además, una especie de interventor de la AFA, adonde transmite las órdenes de Máximo Kirchner.