Daniel Scioli analiza dejar a Axel Kicillof en el Ministerio de Economía para manejar la transición entre su mandato y el de Cristina, en caso de ser el ganador de las elecciones.

En el entorno del gobernador bonaerense no descartan replicar la estrategia de Néstor Kirchner en el 2003, cuando anunció que Roberto Lavagna-quien venía piloteando con éxito la salida de la crisis- continuaría al frente del Palacio de Hacienda. La decisión del fallecido ex presidente le permitió sumar varios puntos en la carrera por la Casa Rosada, que finalmente terminó ganando con el apoyo de Eduardo Duhalde.

Sin embargo, saben que el caso de Kicillof es diferente: su gestión está lejos de mostrar los números lavagnistas, caracterizados por un superávit fiscal récord, tranquilidad cambiaria y tasas de crecimiento “chinas”, en gran parte resultado de la maxi devaluación del 2002.

Scioli podría jugar la carta Kicillof como una forma de mostrar la continuidad del “modelo” y así poder sumar los votos del kirchnerismo duro que por el momento parecen serle esquivos.

Por otro lado, una decisión de este tipo va en línea con la forma en que el mandatario maneja su gabinete. El ex motonauta nunca impulsó grandes cambios entre sus funcionarios, salvo en ocasiones muy puntuales. De hecho, tanto su ministra de Economía actual, Silvina Batakis, como su predecesor, Alejandro Arlía, son funcionarios “de línea” y permanecieron en sus cargos durante la totalidad del mandato.

La posibilidad de un horizonte para Kicillof pos 2015 ya había sido insinuada por el periodista Alejandro Bercovich en una columna del Diario BAE. Hoy Ricardo Carpena, de Clarín, volvió a alimentar esos rumores en una nota sobre el temor de los gremios ante la posibilidad de que el ministro siga en el cargo el año que viene.

Como explicó LPO, lo que acaso sugiere esta alternativa es el hecho de pagar el costo político de ponerle un techo del 27% a las paritarias, con el objetivo de bajar la “nominalidad” en la economía y con ello las presiones inflacionarias. Así, Cristina habría descartado la idea del “Plan Bomba” de la que había advertido el titular de la UIA Héctor Méndez, según Marcelo Bonelli.

De acuerdo al cronista de Clarín, la presidenta buscaría postergar todas las decisiones de corte económico para que el costo del ajuste lo pague el próximo gobierno y la “bomba” no le estalle a ella. No obstante, la decisión de contener las subas salariales iría en línea con el abandono de este plan.

Pero hay otro punto importante por el cual Kicillof podría continuar en el Palacio de Hacienda: el principal asesor económico de Scioli, Miguel Bein, no estaría dispuesto a aceptar ningún cargo, pese a que su nombre es el primero que viene a la cabeza cuando se barajan los posibles candidatos a ocupar el quinto piso del Palacio de Hacienda en un eventual gobierno del mandatario bonaerense.

El ex viceministro de Economía tiene problemas de salud y, por otro lado, los informes de su respetada consultora salen como pan caliente, proporcionándole ingresos más que dignos. Además, esa no sería su única fuente de recursos: en la city saben que Bein tiene estrechos vínculos con el Banco Industrial(BIND).

De todas formas, el asesor de Scioli pretende que la otra directora Ejecutiva del Estudio Bein, la economista Marina Dal Poggetto-, vaya como presidenta del Banco Nación. Dal Poggetto ya había sido asesora en el Ministerio de Economía en tiempos de la Alianza, cuando Bein era el vice de Machinea.

En cuanto al otro asesor económico del gobernador, Mario Blejer, ya blanqueó que no le interesa un lugar en Economía, y se inclina por volver al Banco Central.