El massismo se convirtió en la sesión de hoy en un aliado del kirchnerismo y fue la clave que le permitió a Gabriel Mariotto aprobar en el Senado la expropiación de un polémico predio en La Plata. A los pocos minutos, el proyecto se aprobó en Diputados y se convirtió en ley.

Fue una sesión express donde la expropiación del terreno fue el tema central. De los palcos del recinto del Senado colgaban banderas que aludían al vicegobernador y a Emilio López Muntaner, el autor del proyecto de expropiación. Como adelantó LPO, los vecinos de Abasto estuvieron presentes en la sesión y aplaudieron los argumentos de Muntaner. Sirvieron además como un elemento de presión al resto de los legisladores.

Las organizaciones en Diputados también siguieron el debate desde los palcos.

El proyecto fue aprobado por unanimidad. Toda la bancada del Frente Renovador votó a favor de la expropiación. Lo mismo hizo la bancada radical.

Si bien ayer, el massismo adelantó que no rechazaría el proyecto, sorprendió hoy su voluntad de votar el texto casi sin críticas. En medio de una crisis interna. la bancada de Sergio Massa se convirtió en la llave que posibilitó a Mariotto salir de la incómoda situación en la que quedó la semana pasada cuando, a pesar de garantizarle a los vecinos de Abasto que no serían retirados, más tarde sufrieron un violento desalojo.

Muntaner fue el encargado de exponer sobre el proyecto. Varias veces se dirigió a las familias que seguían la sesión desde el palco. "Están en una situación indigente, no tienen la posibilidadd de tener una tierra y una vivienda", dijo.

Además, no dejó de mencionar al juez Luis Arias, que durante el desalojo había incentivado incluso a los vecinos a cortar la avenida 520 para protestar por la violencia. Luego de mencionarlo, el senador hizo silencio, una señal tácita de que un aplauso debía bajar desde los palcos. Efectivamente así fue.

También hubo aplausos para los concejales de La Cámpora que habían estado en el predio de Abasto junto a los vecinos. Los ediles tuvieron reservado un palco especial en el recinto. Pero además, Muntaner también se ocupó de agradecer a Mariotto a quien destacó como "un hombre responsable, un militante, que estuvo con la gente durante la toma intentando ver qué sucedía".

Con todo, fue una sesión ideal para el ultrakirchnerismo. Hubo banderas, aplausos y autoreferencias. El massismo fue quien habilitó los votos para que el oficialismo tenga su show.