Un sector del sciolismo sintió el impacto por la llegada del senador Alfonso Coll Areco al espacio de Daniel Scioli. Quien salió a poner límites fue el secretario de Servicios Públicos, Franco La Porta, un referente del gobierno provincial con armado en San Miguel.

"Coll Areco es bienvenido a nuestro espacio, pero no va a tener ningún privilegio” y agregó que el senador provincial “llega al espacio para incorporarse como un compañero más, y trabajar por la candidatura a presidente de Daniel Scioli, como lo venimos haciendo desde hace tiempo”, dijo el funcionario a LPO.

Desde la Secretaría de Servicios Públicos recuerdan además que el senador provincial fue electo por la Séptima Sección, pero tiene asiento en el municipio de San Miguel, en donde ha desarrollado sus actividades políticas.

Coll Areco había abandonado las filas del Frente Renovador semanas atrás, y luego de buscar espacio en el PRO, finalmente formalizó su ingreso al sciolismo con una foto con Daniel Scioli en donde se definió que será el candidato a intendente por San Miguel. 

El senador provincial le contestó a La Porta y se mostró "convencido del rol de las primarias como ordenador de la política, y estoy seguro que las voy a ganar".

"San Miguel tiene distintos e interesantes candidatos, como Humberto Fernández (secretario de Hacienda de José C. Paz), Bruno Baschetti (concejal del distrito) o Roberto "Gringo" Lopresti, (un histórico dirigente peronista, referenciado en Gabriel Mariotto).

"Creo que va a ser la interna más interesante del distrito, la que va a llevar a los mejores candidatos, y estoy seguro que el ganador va a ser el próximo intendente de San Miguel", se entusiasmó Coll Areco.

El ex jefe de Gabinete de De la Torre aseguró que pese a sus conversaciones con gente del PRO finalmente se inclinó por jugar con Scioli debido al "compromiso que me brindó el gobernador para que cuando sea presidente, me ayudará a levantar codo a codo a San Miguel del atraso en el que está metido".

La estrategia es unificar el sciolismo en un distrito gobernado por el massista Joaquín De la Torre. Scioli había dado luz verde ya hace varios meses al ex futbolista Carlos Tapia para armar en ese territorio. Sin embargo, las encuestas no le fueron favorables.