En el giustozzismo duro, el de los dirigentes de la Tercera Sección, ya tienen definido que el ex intendente de Almirante Brown no competirá en la PASO como candidato a gobernador, sino que se bajará a pelear por la intendencia de su distrito, tal como reveló LPO y el propio Darío Giustozzi desmintió ferozmente en Intratables.

El dato fue ratificado a este medio por un candidato a intendente del Conurbano, soldado del jefe de la bancada massista en Diputados. La misma fuente negó, por otro lado, la versión de una reunión reservada esta semana entre Giustozzi y Francisco De Narváez, el candidato bonaerense que eligió Sergio Massa tras el pase frustrado de Martín Insaurralde.

Los candidatos del Frente Renovador ya dan por seguro la candidatura del Colorado, como es el caso de Nicolás Russo en Lanús, que lo recibió hoy para visitar a vecinos y empresarios. Este jueves De Narváez visitará La Matanza, La Plata, Berisso, y Ensenada.

Todos se va alineando para que termine siendo el único candidato a gobernador del FR. Cuentan que le prometió al tigrense hacerse cargo de todo el costo de la elección en Provincia, algo que se calcula en unos 180 millones de pesos.

En el supuesto encuentro entre los candidatos a la gobernación, difundido ayer por la agencia Télam, el líder de Almirante Brown le habría manifestado al Colorado su enojo por sus movimientos de campaña: a ojos de Giustozzi, De Narváez no aportó dirigentes propios al Frente Renovador, salió a cooptar a los suyos y se sumó a la interna por la ventana, con armas desleales.

La charla habría sido el martes de la semana pasada, en las oficinas que tiene el FR en el edificio de la esquina de Cerrito y Juncal. Hablan de una discusión "áspera" y con un "planteo duro" de parte de Giustozzi, quien le habría dicho al Colorado “que necesita ser el candidato único del massismo”.

Cerca de Giustozzi aseguraron que esa reunión no existió y que directamente “Darío no habla con De Narváez. Si se reúne, lo que haría es darle entidad, reconocerlo. Para nosotros, De Narváez no existe, no es del Frente Renovador”, señalaron a este medio.

Aunque no lo nombren, es evidente que el enojo es con Massa. "Estuviste un año tocándome el culo con Insaurralde, y ahora seguís tocándome el culo con De Narváez”, dispararon.

“Si ponés a un tipo que sólo pone plata, entonces tus ideales se fueron a la mierda”, sostuvo el hombre que trabaja por el futuro político de Giustozzi. “Darío estaba dispuesto a ir a la guerra, no es un tipo que le escape al bulto, pero tampoco lo van a tomar de tonto. No va a poner en riesgo su distrito yendo a una interna con De Narváez”, aseguró la fuente preparando el terreno par la declinación de Giustozzi.

En rigor, lo que le ocurre al ex intendente de Almirante Brown es sencillo: En prácticamente todos los sondeos mide de la mitad a un tercio de la intención de voto de DE Narváez y como se trata de definir la candidatura en una primaria abierta -donde se licúa el peso de los aparatos-, sabe que prácticamente no tiene chances.

Las dudas pasan por cuándo Giustozzi le comunicará a Massa su definición, si esperará a último momento para bajarse con una buena negociación, o si se resolverá en los próximos días, como algunos estiman.

Otro candidato a intendente referenciado en Giustozzi analizó el escenario junto a LPO y aseguró que no habrá novedades pronto, sino a último momento. Si bien consideró que Darío “sigue con su candidatura y en plena actividad”, no descartó que finalmente se baje. En ese caso, “es preferible bajarse la última semana para negociar desde una posición de fuerza. Nadie se baja faltando tanto para la elección”, evaluó.

Con argumentos similares a los que plantea Giustozzi, Felipe Solá ya puso un pie afuera. Sin embargo, para las fuentes consultadas es una situación distinta: “Giustozzi tiene una estructura grande, atrás hay un montón de concejales, intendentes, ex intendentes, diputados, dirigentes que apostaron por su candidatura, tiene una responsabilidad política y debe dar cuenta de eso”, señaló.

“Darío no puede bajarse gratis, los muchachos se le van a enojar. La única salida es para adelante. Nosotros no queremos un liderazgo moral, peleamos por lugares de poder”, confesó.

El que salió al cruce de estas versiones es una de las espadas de Giustozzi en la legislatura bonaerense, Mario Giacobbe, un hombre que sigue todos los pasos del líder de Almirante Brown. Pese a desmentir que se baja, no ocultó el enojo que tienen con De Narváez.

"Darío Giustozzi va a ser gobernador de la Provincia porque representa una opción de gestión y renovación política muy superior al resto, es el candidato preferido de Sergio Massa y la mayoría dentro del Frente Renovador. Francisco De Narvaez debe ser más prudente y no intentar adueñarse de lo que construyeron otros, y dejar de poner plata para publicar falsas noticias de que Giustozzi rompe el Frente Renovador y se corre de su candidatura", dijo Giacobbe.