Operable desde fines del año pasado, la terminal de contenedores de TecPlata comienza a sentir de lleno los efectos de la fuerte contracción de las importaciones. El holding filipino Ictsi, principal accionista de la terminal, dispuso de licencias a parte de su personal hasta que logren concretar operaciones regulares.

“Parte del personal fue forzado a tomarse licencia con goce sueldo. La idea es evitar los gastos internos”, dijo a LPO Nélson Estrella, titular del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos. Según explicó, los trabajadores de TecPlata esperan la llegada de un barco con contenedores. “Mientras tanto seguimos con capacitacion”, dijo.

El año pasado, Daniel Scioli estaba obsesionado con la demora en la llegada de las enormes grúas de color naranja que habían partido desde Shangai y se demoraban en altamar. El director del puerto La Plata y hombre de extrema confianza, Mariano Goyenechea, recibía a diario la insistente pregunta de parte del Gobernador: “¿Qué pasa que no llegan?”.

Finalmente, tras sortear un abanico de imprevistos el buque Zaen Hua 20 llegó al puerto y en algunas semanas las grúas estuvieron de pie sobre la margen de Berisso, mirando hacia Ensenada. El Gobernador se calmó por unos meses, pero ahora volvió a la carga con una nueva pregunta: "¿Cuando llega el primer barco?" 

La terminal quedó formalmente inaugurada a mediados de diciembre y Scioli había logrado el cometido de uno de sus principales logros de gestión. Sin embargo, al proyecto le quedaban muchos desafíos por delante. El día de la inauguración, podía verse sobre el muelle un portacontenedor de la empresa Maruba. En rigor, había sido un favor de la compañía nacional, una escala “técnica”. Los operadores simularon bajar y subir contenedores, pero luego del acto el buque siguió su curso y ningún contenedor quedó en las flamantes playas de cemento de TecPlata.

Por ahora el panorama es incierto. Los trabajadores portuarios ya comenzaron a manifestar su preocupación. Algunas versiones indican que estaría cerrado un contrato para que en junio llegue el primer barco portacontenedores. “Pero sólo estamos hablando de un barco”, dicen en off the récord fuentes portuarias. No ocultan su pesimismo.

Una a favor para TecPlata

La decisión del gobierno nacional -adelantada por LPO- de congelar la licitación de la Terminal 5 del puerto de Buenos Aires en manos de Bactssa -del grupo multinacional Hutchison Port Holdings (HPH)- hasta octubre de este año le dio un alivio transitorio a TecPlata.

Aunque la licitación quedó en la encrucijada luego del traspaso de la administración del transporte fluvial y marítimo desde la natural órbita del ministerio de Transporte hacia la de Economía, lo cierto es que Ictsi -el principal accionista de Tecplata- había focalizado allí su estrategia para ganar terreno en la pulseada por el negocio de los contenedores.

Desde esa compañía se había solicitado formalmente la suspensión de la licitación. "Es una licitación alevosamente hecha para que no se presente nadie y que la gane Bactssa", argumentaba el presidente de TecPlata, Eduardo Zabalza, al diario La Nación.

En paralelo, la Fundación Ciudad, el Consejo Profesional de Arquitectura y Urbanismo y el Centro Argentino de Ingenieros habían solicitado a Florencio Randazzo (eran sus últimos días con el control de los puertos y las vías navegables) postergar la licitación. Entre sus argumentos cuestionaban el proceso licitatorio por 40 años (30 más 10 de prórroga) cuando el resto de las concesiones se terminan en menos de 10 años.

Con todo, entre pedidos de ONG’s y las internas del gobierno que derivaron el manejo de los puertos hacia Economía, la suspensión de la licitación de la Terminal 5 brindó a TecPlata una bocanada de oxígeno en su carrera para llevar el negocio de los contenedores hacia La Plata.