Si hay algo que quedó claro en las últimas semanas es que el Gobierno nacional está dispuesto a responder a todos los pedidos que le vienen realizando las nuevas autoridades de Federación Agraria (FAA) encabezadas por el kirchnerista Omar Príncipe.

Pero hasta el momento, el oficialismo sólo cumplió deseos federados de bajo tenor con el único objetivo de romper la Mesa de Enlace. La cuestión es que ahora en la Casa Rosada están estudiando tomar una medida para terminar de alinear a la FAA.

Según pudo averiguar La Política Online con diversas fuentes oficiales, en el entorno del ministro de Economía, Axel Kicillof, recibieron con buenos ojos la propuesta de la entidad federada para segmentar las retenciones a las exportaciones agropecuarias.

Se trata de un reclamo histórico de la FAA que últimamente fue dejado de lado para preservar la relación política con el resto de las entidades rurales (Sociedad Rural, CRA y Coninagro) y mantener en pie el enfrentamiento con el kirchnerismo.

En este contexto, desde la llegada de Príncipe al poder, se decidió ir a fondo nuevamente con este reclamo sabiendo que, tras la salida de Eduardo Buzzi, muy probablemente el Gobierno se siente, al menos, a analizar dicha medida.

De hecho, el próximo 19 de marzo la FAA realizará una movilización frente al Ministerio de Agricultura sobre la Avenida Paseo Colón para reclamar por "políticas públicas diferenciadas", entre las cuales, obviamente, se cuenta la segmentación de retenciones.

En rigor, las fuentes consultadas cuentan que la concentración de productores federados en Agricultura será a modo simbólico para instalar el reclamo y esperar luego una respuesta del kirchnerismo que ya está siendo analizada en el ámbito del Ministerio de Economía.

Si bien no hay mayores avances, la idea sería que se aplique un viejo proyecto presentado en su momento por los ex diputados Ulises "Chito" Forte y Pablo Orsolini, que establece la devolución de retenciones en soja, trigo, maíz, girasol y sorgo.

La iniciativa determina que se reintegre el 100% del pago de retenciones a quienes producen en las escalas más bajas (hasta 600 toneladas), mediante un sistema de compensaciones bancarias con un plazo de devolución menor a 30 días de realizada la presentación por parte del productor.

Así las cosas, en el oficialismo se entusiasman con la idea dado que la medida recién se aplicaría durante la cosecha que comienza en abril/mayo, aunque muy posiblemente los fondos reintegrados los tenga que pagar el próximo gobierno.

Es decir, en términos políticos, un anuncio de tales características permitiría terminar de cooptar a la FAA y romper en pedazos la desdibujada Mesa de Enlace bajo casi ningún costo económico para la actual administración kirchnerista.

En este contexto, cabe aclarar que ya fueron varios los pedidos de Príncipe a los que el Gobierno respondió rápidamente. En primer lugar, Agricultores Federados Argentinos (AFA) -la cooperativa de FAA- comenzó a recibir con celeridad permisos de exportación (ROEs).

Luego la entidad federada acordó con el Banco Nación que vuelvan a otorgar créditos a pequeños productores de hasta 600 toneladas de soja (lo que fue interpretado por el resto de las entidades como una clara discriminación al conjunto de los agricultores).

Y por último, -una novedad que surgió esta semana- se conoció que el Gobierno subsidiará por el término de tres meses con 0,30 centavos por litro de leche a pequeños tamberos a partir de un pedido expreso de Prícincipe.