El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, desautorizó al flamante ministro de Salud, Daniel Gollán, al aclarar que el debate sobre la legalidad del aborto "no forma parte de la agenda de este Gobierno", aunque admitió que dentro del oficialismo "hay opiniones a favor y en contra" de la iniciativa. 

"No forma parte de nuestra agenda", advirtió el funcionario, y apuntó: "Qué mejor oportunidad para haberlo expresado la de ayer", cuando la presidenta Cristina Kirchner inauguró las sesiones ordinarias del Congreso.

Fernández formuló estas apreciaciones en contacto con Radio 10, poco después de que el flamante ministro dijera que desde su cartera propiciará "un debate maduro con todos los sectores de la sociedad" con respecto al aborto. 

El funcionario que reemplazó a Juan Manzur sostuvo que es necesario "un debate serio sin ponerse en los extremos ideológicos y religiosos", y resaltó que "hay una ley que hay que cumplirla".

"En el país hay 500.000 abortos por año y es la principal causa de muerte materna. Hay que hacer un debate serio sin ponerse en los extremos ideológicos y religiosos. Desde el punto de vista del sanitarismo uno tiene que hacer algo. Vamos a propiciar un debate maduro con todos los sectores de la sociedad", señaló Gollán.  

Pero Aníbal salió a marcarle la cancha de entrada. El jefe de Gabinete señaló que "la realidad es que dentro del peronismo hay distintas maneras de pensar" sobre el tema, y que "cada uno asume la que le parece", pero recalcó que "no está en la agenda del Gobierno discutir ese tema".

De figurar en los planes del Gobierno, "qué oportunidad para haberlo expresado la de ayer", razonó el funcionario, quien indicó que, cuando se aborde la posibilidad de legalizar el aborto, deberá hacerse con "una política y una discusión muy de fondo".