La ex esposa de Alberto Nisman, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado, volvió hoy a desestimar la posibilidad de un suicidio al afirmar durante el entierro del fallecido fiscal, en el Cementerio Israelita de La Tablada, que tiene "la certeza de que esto fue obra de otra persona".

"Ninguno de nosotros creemos que vos hayas sido el acreedor de este final. Tenemos la certeza de que esto fue obra de otra persona. No sabemos de quién, es difícil", aseveró la magistrada.

Durante la ceremonia, Arroyo Salgado cuestionó la investigación judicial al apuntar "no sé si están trabajando como deberían trabajar", pero se comprometió a hacer "lo mejor para poder llegar a la verdad".

"Como colega del derecho, sé que confiás en mí. Como magistrada tengo que pedirte perdón, porque sigo perteneciendo a este poder (judicial) y hoy siento que no sé si están trabajando como deberían trabajar. Y espero que se sepas perdonar lo que se hizo y todavía no se hizo para descubrir la verdadera razón de este final", resaltó la ex esposa de Nisman. 

Según consignó la Agencia Judía de Noticias, Arroyo Salgado expresó: "Sé que confiás en muchos colegas, compañeros y colaboradores. Hay gente en nuestro ámbito que está dispuesta a luchar como vos lo hiciste por la verdadera respuesta. La lucha por la verdad y justicia por las 85 vidas era tu prioridad. Haremos lo mejor para poder llegar a la verdad".

Finalmente, la jueza le dio un tono familiar a su mensaje al afirmar: "Sé que vos te quedás tranquilo porque sé que vos confiás en mí y en el cuidado que yo voy a tener sobre nuestras hijas, porque las amo. No me siento sola para cuidar de ellas, protegerlas, porque tenemos una familia. Yo no puedo creer que yo esté acá y vos estés ahí".