Héctor Timerman confirmó que Cristina Kirchner no lo envió en representación del Gobierno a la histórica movilización contra el terrorismo en París, donde decenas de líderes mundiales rechazaron el ataque contra Charlie Hebdo y a la que el canciller asistió en carácter de "ciudadano".

En una sorpresiva conferencia de prensa que dio esta mañana en la Casa Rosada, Timerman negó que la Presidenta no lo haya autorizado a concurrir en carácter oficial, y aseguró que no habló con la jefa de Estado desde Francia, donde había hecho una escala en su regreso desde China.

"Decidí estar como ciudadano que está en contra de todos los ataques terroristas sean cometidos en París o en Nigeria", afirmó Timerman, en una declaración en la que no sólo no terminó de explicar por qué el Gobierno no envió un representante oficial sino que dejó expuesta a Cristina Kirchner, dando a entender que la presidenta le prohibió ir a la marcha en carácter oficial.

Es que sin tener cuenta las ridículas teorías y posiciones de parte del kirchnerismo duro, la falta de tacto de Cristina sigue siendo sorprendente . Francia es una de las pocas potencias occidentales que cuenta a la Argentina como sus aliados, tal como lo demostró en el conflicto con los fondos buitres o en la intervención para encaminar la negociación del Gobierno con el Club de París. Como si eso fuera poco, el presidente François Hollande tiene -o tenía- previsto visitar el país en marzo y Cristina ni siquiera le dedicó un tuit de apoyo.

Timerman, que es uno de los funcionarios más obsecuentes de la presidenta, no hizo más que confirmar que Cristina no quiso rechazar el ataque terrorista con la vehemencia que ameritaba el caso y sólo realizó un repudio a reglamento, a través de un tibio comunicado de Cancillería y enviando a la embajada en Francia.

Timerman argumentó que "cuando uno va a una marcha y se solidariza lo importante es estar con el pueblo" y consideró que "no hay lugar para los cargos ni para ningún de tratamiento especial".

"Participé, con un grupo de amigos y familiares, junto al pueblo francés como muchas veces a lo largo de mi vida lo hice en Buenos Aires, en Israel, en Venezuela, en Chile, en Italia y otros países", destacó Timerman, trasmitiendo una posición mucho más lógica de lo que venía siendo la tibia posición del Gobierno sobre los ataques en París.

En otro tramo de su conferencia, el canciller admitió que "Francia siempre fue solidaria de los argentinos perseguidos por la dictadura". El gobierno de François Hollande es, además, uno de los pocos aliados que tiene Cristina Kirchner entre las potencias occidentales, por lo que no deja de sorprender el silencio de la mandataria.

Por otro lado, Timerman acusó a los medios de buscar "destituir, denigrar y agraviar al gobierno nacional" al criticar la información publicada en el diario Clarín sobre su ausencia en la marcha encabezada por los principales mandatarios europeos y aseguró que sufre "una campaña de persecución" en su contra.

Clarín publicó que, una vez en París, el canciller fue invitado por las autoridades francesas a participar en la marcha del domingo pasado y respondió que debía consultar a Buenos Aires. Luego de eso, avisó que su gobierno le ordenó que no formara parte de la movilización.

Por último, Timerman detalló en un comunicado que cuando aterrizó en París, luego de viajar a China para ultimar detalles de la misión oficial que encabezará la Presidenta, la embajadora argentina María del Carmen Squeff le avisó si quería firmar el libro de condolencias por los atentados de París y señaló: "Por supuesto que fui como lo hubiese hecho con cualquier gobierno que atraviese una situación similar".