La decisión de los intendentes mendocinos de desenganchar su elección del comicio de gobernador, terminó impactando en la puja que mantienen Sergio Massa y Mauricio Macri por conseguir el apoyo del radicalismo.

Esta determinación golpeó especialmente al jefe del radicalismo mendocino, Alfredo Cornejo, quien aspira a competir por la gobernación y tiene un acuerdo político prácticamente cerrado con Mauricio Macri, que entró en crisis por el acercamiento de Julio Cobos a Massa.

El ex vicepresidente es por lejos el político con mejor imagen en Mendoza y al ya no contar Cornejo con el arrastre de los intendentes mendocinos, queda rehén del apoyo del ex vicepresidente si quiere hacer una elección competitiva.

El radicalismo controla 4 de los 18 municipios mendocinos. El primero en desdoblar fue nada menos que Mendoza Capital, donde en la pasada Convención de la UCR mendocina, Cobos dio la primera puntada de su estrategia para debilitar a Cornejo que varias lecturas apresuradas pasaron por alto. En esa reunión se aprobó que en las elecciones de la capital provincial, la UCR iría con la histórica Lista 3, cerrando la puerta a un acuerdo con Macri, como se terminó cristalizando días atrás, cuando el líder del PRO tomó la insólita decisión de retirarse de la pelea.

Pero el golpe de gracia a Cornejo –a la sazón intendente de Godoy Cruz- se lo dieron ayer sus otros tres colegas Gustavo Pinto de La Paz; Mario Abed de Junín y Ricardo Mansur de Rivadavia, que confirmaron el desdoblamiento de sus distritos mediante un decreto: el 12 de abril será la fecha para las PASO y el 14 de junio para los comicios generales en los tres municipios. Cornejo quedó así a la intemperie.

Cornejo, que se convirtió con paciencia y mano de hierro en el hombre fuerte del radicalismo mendocino, ve así esfumarse su estrategia de campaña que funcionaba con elecciones unificadas y la posibilidad de competir yendo en las boletas de presidente de Unen y de Macri, posibilidad que también entró en crisis por la decisión del gobernador Paco Pérez de prohibir las listas espejo, en una movida que como reveló LPO, puede tener un correlato nacional.

De perfil bajo, poco carisma, con pasado como operador estrella de Cobos de quien luego se distanció, Cornejo hizo una correcta gestión en sus 8 años como intendente de Godoy Cruz. Pero su conocimiento es limitado en los departamentos alejados y en los del Gran Mendoza, los más densamente poblados, que gobierna el peronismo.

Ahora, en una posición de debilidad ni siquiera le queda resto para impedir una eventual candidatura a gobernador del propio Cobos, que lanzó hoy un mensaje contundente a Ernesto Sanz y Cornejo: “Si el objetivo (del radicalismo) sólo es ganar provincias, avisen porque yo me voy a Mendoza y ganamos provincias", afirmó en una entrevista con El Cronista.

El resultado de esta pelea no es menor en el marco de la presidencial. Si Cobos finalmente se presenta, Cornejo quedaría fuera de carrera y Macri habría perdido la posibilidad de ganar nada menos uno de los cuatro distritos más grandes del país.