Todos los veranos Daniel Scioli camina la escollera norte el puerto de Mar del Plata junto al intendente Gustavo Pulti. Durante varios minutos, el Gobernador se queda contemplando la terminal de Cruceros terminada hace más de tres años y que desde entonces -vacía y solitaria- espera la llegada de un barco con turistas extranjeros.

El ritual se repite año a año. El Gobernador bonaerense pide explicaciones y la respuesta siempre es la misma: el banco de arena que con cada ola se forma en el ingreso al puerto y que lo vuelve inoperativo para buques de gran calado.

Con la terminal lista luego de una inversión de 30 millones de pesos, la llegada de Cruceros a Mar del Plata fue anunciada tres, diez, veinte veces por el gobierno provincial y en particular por el jefe comunal. Sin embargo, el Gobernador podría terminar su mandato sin ver a los turistas extranjeros desembarcar en la ciudad más importante de la costa bonaerense.

Hace pocos días, terminaron las obras de dragado en el puerto y después de innumerables retrasos se logró remover el banco de arena que se forma en el ingreso a un costo de uno 108 millones de pesos pagados por Nación y Provincia en partes iguales.

Durante los trabajos se sucedieron conflictos gremiales, roturas de la draga (fundió el motor principal a poco de arribar a Mar del Plata). Incluso los operarios se encontraron con un resto náufrago enterrado a nueve metros de profundidad de proporciones tales que motivó el trabajo de un equipo de buzos. Luego de varios días y con un costo extra de 350 mil dólares adicionales, se logró desenterrar lo que resultó ser un fragmento de una draga que trabajó en el banco de arena en los años 90 durante el gobierno de Eduardo Duhalde.

Pese a todo, hoy el dragado del canal de acceso está terminado. Sin embargo, ahora se presenta un inconveniente propio de la improvisación: la licitación no incluyó el dragado de los frentes de amarre de la escollera norte donde deben recalar buques porta contenedores y Cruceros. En definitiva: ahora los buques con turistas pueden ingresar al puerto pero no amarrar frente a la terminal que allí espera.

En los últimos días de diciembre, Scioli volvió a recorrer la escollera junto a Pulti y el diputado provincial Rodolfo Iriart. Luego de contemplar con nostalgia la terminal que jamás se usó dijo a los periodistas que en febrero “estarían dadas las condiciones” para que ingresen cruceros y portacontenedores.

Sin embargo, fuentes portuarias consideran que los plazos no son suficientes y que pasarán varios meses para la llegada de barcos con turistas. Según pudo saber LPO, terminados los trabajos en el canal de acceso, la prioridad ahora está en el dragado de la zona de amarre de porta contenedores toda vez que el servicio se suspendió a mediados de 2012 luego que la naviera Maersk denunciara dos incidentes al intentar sortear el banco de arena. Recién después se buscará una solución para dragar el frente de amarre de los Cruceros.

Por estas horas, en el consorcio del puerto calculan que la obra demandará unos 30 millones. Sin embargo, el principal problema es conseguir una draga que llegue en poco tiempo al país para realizar el trabajo.

Algunas versiones indican que la draga china del Grupo Román que trabajó en el canal de acceso es demasiado grande para trabajar en esa zona. Lo mismo sucede con la draga 259 C Mendoza, propiedad del Estado nacional, que además mostró su ineficacia durante el inicio de los trabajos.

El columnista del portal 0223, Roberto Garrone, en un repaso por los últimos fracasos de la embarcación, recuerda que fundió el motor principal a poco de arribar a Mar del Plata y que el motor secundario llegó en piezas sueltas que nunca terminaron de armar. Además destaca que el personal (43 tripulantes) estuvo de paro porque se rompió la cocina y no volvieron a trabajar hasta que la importaron de Italia. Mientras tanto hacia una simulación de dragado durante el verano posicionándose en el mar frente a la playa Bristol, lo que le permitía verse casi como parte del escenario, de fondo en el programa de Mirtha Legrand.

En tiempos de campaña, ningún candidato presidencial dejaría de lado la posibilidad de inaugurar una terminal de cruceros en plena temporada de verano. Por el momento, sólo la posibilidad de utilizar las dos dragas que hoy están en Mar del Plata le posibilitaría a Scioli cumplir su deseo de ver a los cruceros ingresar a la terminal.

Mientras tanto, en el sciolismo buscan ideas. 

Meses atrás, trascendió que una posibilidad de inaugurar la terminal era fondear el crucero en alta mar y llevar a los turistas extranjeros en lanchas a la terminal. Por entonces, esa idea no había gustado nada al Gobernador. ¿Lo pensará ahora?