Los homicidios en ocasión de robo o relacionados con otros delitos experimentaron un notable descenso desde el abril, cuando Daniel Scioli decretó la emergencia en seguridad. Así lo establecen los datos de la Procuración de la Corte Suprema de la Provincia en un informe que trajo alivio al gobierno en un tema sensible de cara a la campaña del próximo año.

La estadística indica que en abril hubo en la provincia 28 homicidios dolosos cometidos en ocasión de robo u otros delitos vinculados a la inseguridad pública, mientras que en septiembre esa cifra cayó a 17 casos. En el Conurbano, la merma es aún más marcada: un descenso de 25 a 9. Medido en términos porcentuales, el descenso es del 40 y el 64 por ciento, respectivamente.

El dato fue elaborado por la Procuración, como ocurre habitualmente, a través de las Investigaciones Penales Preparatorias (IPP), que son las causas abiertas en la Justicia por los delitos. Y se refieren a un indicador que no tiene cifra “negra”, como puede ocurrir con los robos que muchas veces no son denunciados por sus víctimas.

En el gobierno provincial, los datos de la Procuración llevaron alivio y se interpretó como una evidencia del resultado positivo de una “mayor prevención”.

El Jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires, Alberto Pérez, afirmó en declaraciones periodísticas que “tenemos que seguir trabajando para que el ciudadano esté totalmente tranquilo, no podemos decir que estamos satisfechos pero las estadísticas de la Suprema Corte de Justicia son un claro indicador de que las políticas que estamos llevando adelante dan resultados”.

Desde el gobierno explican que la Provincia está incorporando 25 mil nuevos agentes: los 10 mil que egresan el 29 de noviembre y los 15.000 que en 6 meses estarán en las policías locales.

Fuertes críticas del massismo

"A todas luces es una vergüenza que digan que de un mes a otro bajo el delito", aseguró a LPO el senador massista Jorge D'Onofrio. "Lo que los sciolistas no dicen es que las lecturas se hacen de manera interanual, y no mes a mes. Además, que se modifique el índice de homicidios de manera mensual no significa que baje la delincuencia".

Además, el jefe de los senadores massistas aseguró que la Procuración dio instrucciones precisas para modificar la forma de catalogar los homicidios. "Si existe una mínima relación entre víctima y victimario deja de tipificarse como homicidio y así caen las cifras", consideró.

"Lo que vemos es que los presos se siguen escapando. Ya van 60 en lo que va del año, vemos que cada vez hay más oficiales de policía detenidos. Y decir que bajaron los homicidios porque hubo 5 o 6 homicidios menos es un disparate".

Según el informe de la Procuración, en abril hubo 28 crímenes de este tipo en la provincia, 31 en mayo, 24 en junio, 20 en julio, 18 en agosto y 17 en septiembre. En el conurbano, la evolución es 25, 26, 18, 16, 12 y 9 casos para los mismos meses.

El gobierno elaboró un estudio en el que correlacionó algunas de las medidas contenidas en la Emergencia, decretada el 4 de abril por Scioli, con la evolución decreciente de los homicidios. Así, ese mes hubo 28 crímenes, pero agosto, cuando se habían entregado 761 nuevos patrulleros y se habían puesto en funcionamiento 36 Comandos de Patrullas Comunitarias (CPC), los crímenes descendieron a 20 en el mes.

Para el ministro de Justicia, Ricardo Casal, la cuestión se resume en que “lo que ocurre es que ahora hay mayor prevención”, que es “la principal vía para reducir” los crímenes. Para el gobierno de Scioli, los CPC permitieron una “mayor presencia en los barrios” y suponen “un cambio de la lógica de la comisaría, para que los vehículos y el personal esté abocado en su mayoría a prevenir”. Hoy hay 40 en funcionamiento, que cuentan con 1.393 móviles nuevos.

La emergencia permitió además reincorporar 500 policías retirados a las comisarías para que un número equivalente de hombres más jóvenes pudiera incorporarse al patrullaje directo. Además, implicó un proceso para mejorar las comunicaciones, con adquisición de nuevos equipos digitales para localizaciones de los móviles tipo AVL y cámaras lectoras de patentes. Y se destruyeron 34 mil armas, mientras otras 14 mil seguirán el mismo destino en los próximos días.

Se están comprando, también, 10 mil pistolas y chalecos anti bala, 4,5 millones de municiones y escopetas calibre 12.70. Scioli planea que la saturación policial del territorio continúe: el 29 de este mes egresarán 10 mil efectivos (una cifra inédita para una sola camada) y se espera que otros 15 mil estén listos en junio para sumarse a las policías locales creadas por decreto por el gobernador.