Luego de los zigzagueos del radicalismo que como reveló en exclusiva LPO, tanteó una negociación para canjearle al gobierno el lugar en la Corte Suprema para la radical Mónica Pintos a cambio de nombrarle a Cristina cuatro camaristas de Casación claves para bloquear las investigaciones de corrupción, sin margen político para otra cosa, esta noche toda la oposición del Senado se comprometió públicamente a bloquear cualquier intento del kirchnerismo de nombrar al reemplazante de Eugenio Zaffaroni.

Senadores nacionales por el Frente Amplio Unen (FAU), el PRO y el peronismo disidente firmaron hoy un compromiso de "rechazar el tratamiento de cualquier solicitud de acuerdo para la designación de jueces de la Corte Suprema de Justicia de la Nación" propuesta por el Gobierno.

Lograron la firma de 28 senadores, quitando al oficialismo la posibilidad de alcanzar los dos tercios de los senadores que se requieren para nombrar un nuevo integrante de la Corte.

Los senadores se comprometieron a bloquear cualquier intento de nombrar al reempazante de Zaffaroni que deja ya anunció que dejará la Corte a fin de año, "hasta tanto finalice el próximo proceso electoral en virtud del cual se elegirá presidente", señala el documento suscripto.

Entre los firmantes se encuentran los radicales Ernesto Sanz y Gerardo Morales. Se salda así la interna que los enfrentaba, ya que el primero había abierto las negociaciones con el kirchnerismo y apenas lo reveló LPO, Morales salió a cruzar abiertamente toda posibilidad de garantizarle ciertos márgenes de impunidad al kirchnerismo mediante el nombramiento de los camaristas de Casación.

Pero también se le cerró la puerta al gobierno por la vía del Peronismo federal, que secretamente estaban explorando. Firmaron el documento Carlos Reutemann y Juan Carlos Romero. Y se sumaron los macristas Gabriela Michetti y Diego Santilli; así como Fernando "Pino" Solanas; Luis Juez y el socialista Rubén Giustiniani, entre otros opositores.

Las negociaciones se habían iniciado ni bien el Gobierno confirmó que Zaffaroni iba a cumplir su palabra de renunciar a la Corte el 31 de diciembre, ya que a principios de enero del año próximo cumplirá 75 años, la edad límite establecida por la ley para integrar el tribunal. 

A partir de la renuncia de Zaffaroni empezó un debate sobre si correspondía o no cubrir la vacante, ya que la normativa impulsada por el kirchnerismo estableció una Corte de cinco miembros, y a partir de enero quedará integrada por cuatro, tras el fallecimiento de Enrique Petracchi el mes pasado. 

En la conferencia de prensa en la que se anunció el acuerdo opositor,  Morales explicó que "habría problema en el quórum si fueran tres miembros", pero la actual conformación de cuatro "no paraliza la actuación de la Corte Suprema".

Por su parte, Solanas reveló que "la urgencia del gobierno (por avanzar con el nombramiento) es porque buescan crear un pacto de impunidad".