El sector automotriz terminaría el 2014 con una caída del 23%, como consecuencia del cepo cambiario, las trabas a las importaciones y la recesión económica. El dato fue estimado por la consultora Abeceb.com, especializada en el rubro, que además prevé que las ventas en el mercado interno cerrarían con una baja del 28%. De hecho, el retroceso los patentamientos entre enero y octubre frente al mismo lapso del año pasado fue del 27%, de acuerdo a la Asociación de Concesionarias de Automotores de la República Argentina (Acara).
Para el 2015, el panorama no luce demasiado alentador. Gonzalo Dalmasso, coodinador de esa área de la consultora de Dante Sica, explicó a LPO que el año que viene “se espera un poco más de caída en el mercado interno, y planes similares de producción para las empresas” en torno a los 600 mil vehículos.
En Abeceb prevén que habrá “menos tracción en los planes de ahorro” y seguirá el control de divisas por parte del gobierno, frenando las importaciones o demorando el pago de las mismas, lo que incrementa las deudas de las terminales locales con las casas matrices.
“Desde septiembre el gobierno habilitó a las automotrices unos U$S100 millones para importaciones, que alcanza para muy poco. Después liberó un poco más, pero hubo faltantes durante mucho tiempo”, comentó Dalmasso.
“El gobierno no traba tanto la entrada de insumos sino al mercado oficial de divisas”, puntualizó el analista. El problema es que de esta manera la deuda deudas con sus proveedores externos y casas matrices no hace más que abultarse.
En el mercado automotor estiman que la deuda acumulada con las casas matrices supera los U$S2000 millones, de los más de U$S5000 millones en total cuyos pagos están demorados, según denuncia la Cámara de Importadores de la República Argentina(CIRA).
En diálogo con Radio América, el titular de la Cámara de Comercio Automotor, Alberto Príncipe reconoció que “estamos en una crisis, las terminales tienen un incumplimiento de abastecerse de autopartes importadas”, aunque se mostró confiado en que “en el primer trimestre del año que viene esto se repondrá si se acomoda la parte macroeconómica” .
“Las concesionarias están complicadas. Estamos preocupado porque alguien en el camino va a quedar”, advirtió el directivo.
“Es una crisis importante, pero no es solo sostenida por argentina, es sectorial. También sucede en Brasil, que es el mayor importador”, apuntó.
Respecto al aumento de precios, Príncipe señaló que “depende del costo del insumo, si suben, también lo harán los precios”.
Según publicó hoy El Cronista, en el sector automotriz quieren derogar la ley de principios de año que fijó un impuestazo sobre los vehículos, con el objetivo de frenar la sangría de divisas. “Están ejerciendo presión para revisar el mínimo. Si con nuevos aumentos llegan a alcanzar las gamas medias, quedarán fuera del mercado”, sentenció una fuente del rubro.
Polémica por los faltantes en el Procreauto
“El mercado está desabastecido. Hay falta de productos, no se está produciendo lo que se consume”, reconoció Príncipe en declaraciones radiales.
Tal como adelantó Clarín, habría un faltante de los modelos incluidos en el plan Procreauto de unos 12 mil unidades.
“Algunas como Peugeot o Renault piden prórrogas porque están trabajando con un solo turno y el programa se concentra en modelos puntuales”, analizó Dalmasso.
Las concesionarias están preocupadas porque perdieron cerca de 40.000 unidades de su stock y argumentan se descapitalizaron por culpa de los fabricantes, porque las entregaron y nunca se las repusieron. En este caso, los que traían autos del exterior fueron los primeros en ver cómo se cortaba el ingreso de los vehículos, en un marco general de control de importaciones.
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