La AFIP que dirige Ricardo Echegaray difundió el primer caso de una investigación super secreta que viene llevando hace meses sobre una fraude monumental para hacerse de divisas de gran empresas y multinacionales.

Se trata de la previsible sobrefacturación de importaciones, maniobra que se vuelve redituable ante la breca fiscal. Concretamente a la cuestionada multinacional Procter & Gamble la acusa de un fraude de u$s 138 millones.

La denuncia golpea a esta multinacional justo cuando estaba enmarcada en un cambio de imagen a nivel global, tratando de imponer la marca G&P para su infinita línea de productos, estrategia de marketing que en la Argentina apeló a figuras populares como Susana Gimenez y Eber Ludueña.

Echegaray también solicitó a la Justicia que impida la salida del país de los directivos de la filial local hasta tanto se resuelva la situación y suspendió preventivamente el CUIT y la inscripción en el registro de importadores y exportadores de P&G, lo que imposibilita a la multinacional adquirir divisas en el mercado cambiario.

Además, inició los ajustes respectivos de “precios de transferencia” por la evasión del Impuesto a las Ganancias.

La investigación de la AFIP, que ya derivó en una denuncia penal, incluso puede disparar en Estados Unidos una pesquisa de la SEC que fiscaliza el comportamiento de compañías que cotizan en Wall Street como es el caso de P&G.

La investigación que lleva adelante la Aduana es mucho más extensa y según pudo averiguar LPO tiene en la mira a uno de los más grandes laboratorios del país, con fluidos contactos con el kirchnerismo y en especial La Cámpora; así como a una de las siderúrgicas mas poderosas, entre al menos una decena de grandes empresas que han hecho millones de dólares con la sobrefacturación de importaciones.

Apretado por la falta de divisas, el Gobierno empezó a apretar poner la lupa en serio sobre las operaciones de importación.

Las compañías internacionales, por su lado, se quejan que no sólo no pueden girar dividendos a su casa matriz, sino los pagos en concepto de royalties por uso de marca y los cargos correspondientes por actualizaciones de tecnología.

La denuncia

En el caso de Procter & Gamble, la AFIP detectó además diferencias entre las Declaraciones Juradas Anticipadas (DJAI) y las destinaciones de importación por otros u$s 19 millones.

El proceso de análisis se focalizó sobre un total de 2.608 operaciones de importación de maquinas de afeitar, pañales y artículos higiénicos. Estos productos importados que se “sobrefacturaron” corresponderían a la excusa de incluir en el precio “royalties” y demás “gastos intercompanies” de publicidad y administración.

El organismo que lidera Echegaray denunció que la mercadería importada por P&G era proveniente de Brasil, pero las operaciones se triangulaban facturándose desde un trader vinculado en Suiza.

La AFIP sostuvo que mediante esta planificación fiscal nociva de los “precios de transferencia”, P&G fugó divisas al exterior y ahuecó la base imponible del Impuesto a las Ganancias en la Argentina y reveló que el 10 y 15 de octubre pasados, presentó las denuncias correspondientes en la Fiscalía Nacional en lo Penal Económico Nº 2, a cargo de Emilio Guerberoff.

“Nuestro objetivo principal es que P&G reintegre al Banco Central las divisas fugadas y que pague las sanciones aduaneras y el impuesto a las ganancias evadido por la manipulación de los precios de transferencia”, afirmó Echegaray.

Además, notificó de estas operaciones irregulares al Banco Central para que avance con la aplicación de las sanciones previstas en la Ley Penal Cambiaria.

También requirió información a las Administraciones Tributarias y Aduanas de Brasil y Suiza y cursó notificación del fraude a la Securities and Exchange Commission (SEC) de Estados Unidos.

Procter & Gamble es un multinacional de bienes de consumo que se formó en 1837. Según consigna en su propia página web, la firma se encuentra en más de 180 países donde produce y distribuye alrededor de 300 marcas conocidas, como Gillette, Pantene, Duracell, Ariel, Pampers , entre otras.

En su último informe anual consta que P&G genera ventas anuales por u$s 83.000 millones.