El presidente del Banco Central Alejandro Vanoli salió a desmentir que Cristina vaya a pagarle a los fondos buitre el año que viene, una vez que venza la cláusula RUFO, tal como había publicado LPO y Clarín.

El equipo de prensa del BCRA emitió un comunicado en donde tilda a las notas como “operaciones periodísticas” y “funcionales” a los intereses de los holdouts.

Vanoli consideró “absolutamente falsa la versión publicada en Clarín según la cual él habría planteado ante inversores en Washington que se habría decidido pagarle a esos fondos”.

“Estos inventos periodísticos están destinados a crear zozobra en el sector financiero y a generar un escenario para facilitar maniobras especulativas en el mercado de bonos”, advirtió el presidente del BCRA.

El funcionario alertó además que “este tipo de operaciones también apunta a generar condiciones para que se produzca la activación de la cláusula RUFO”.

Las declaraciones de Vanoli vienen a raíz de la nota del periodista Marcelo Bonelli en donde revela que el funcionario le habría anticipado a bancos extranjeros que la presidenta acordaría con los holdouts en el 2015, aunque trataría de mostrar que no se rindió ante los buitres, con una salida “elegante” y “discreta”, según reprodujo el cronista.

Fuentes que estuvieron presentes en esos encuentros contaron a LPO que Vanoli-quien se mostró en todo momento muy inseguro- supeditó el acuerdo a la magnitud del deterioro económico por el que esté atravesando la Argentina en ese momento.

Los banqueros concluyeron por las palabras de Vanoli que si la economía se sigue deteriorando para enero de 2015, a Cristina y Kicillof no les quedará otra alternativa que sentarse a negociar con los buitres y pagarles la deuda. En cambio, si el Gobierno consigue algo de margen para pilotear la situación, el arreglo se seguirá demorando.

LPO había anticipado el mes pasado que en el Gobierno hay dos grandes visiones sobre la posible resolución del conflicto. Por un lado, Kicillof y los suyos prefieren seguir por el camino de no negociar con los buitres y aguantar “con lo nuestro” hasta el fin de mandato de Cristina. Otro sector, en cambio, reflotó la posibilidad de arreglar con Paul Singer y compañía, para poder salir a tomar deuda en el exterior y estabilizar las reservas