El kirchnerismo sigue marginando a su aliado Aníbal Ibarra y tras realizar una maniobra para dejarlo con un monobloque en la Legislatura porteña, ahora planea dejarlo sin lugar en la Auditoría General de la Ciudad.

Tal como anticipó LPO en exclusiva hace un mes, Susana “la Tana” Rinaldi, la única compañera de banca del bloque de Ibarra –llamado Frente Progresista y Popular-, dejará la Legislatura y se irá a Francia como agregada cultural de la embajada argentina en París.

El ex jefe de gobierno, que lanzó su campaña para volver a la jefatura, se quedará sin compañeros de bloque con la salida de la Tana. Ibarra pelea sin éxito para que el lugar de Rinaldi lo ocupe uno de sus colaboradores, Fernando Muñoz, que fue cuarto en la boleta en 2011.

Pero quien reemplazará a La Tana será el auditor Eduardo Epszteyn, que ocupará una banca en el bloque del Frente para la Victoria.

Epszteyn se peleó con Ibarra en 2011, luego de que el destituido ex jefe de gobierno lo traicionara justamente con Rinaldi y lo apartara al tercer lugar de la lista colectora que acompañó la boleta de Daniel Filmus.

Con su vuelta a la Legislatura, Epszteyn dejará vacante una silla en la Auditoría General de la Ciudad, que tiene 7 auditores generales. Ibarra esperaba que ese lugar fuera ocupado por alguien del Frente Progresista y Popular en el que militaba Epszteyn antes de abandonarlo.

Pero el kirchnerismo tampoco piensa darle ese lugar y buscará nombrar a alguien del Frente para la Victoria.

A quien mencionan es a Fernando Renzi, asesor del diputado nacional Juan Cabandié. La esposa del camporista Cabandié, Cecilia Segura, es la presidenta de la Auditoría.

Renzi ya fue director de Control de Economía, Hacienda y Finanzas de la Auditoría. Lo más llamativo es que fue jefe de despacho de Ibarra y, tal como hizo Epszteyn, también lo abandonó.