Los candidatos a Gobernador de la provincia Felipe Solá, Darío Giustozzi y Gustavo Posse mueven sus fichas en La Matanza y sus dirigentes locales se encaminan a una feroz interna para ser los candidatos de Sergio Massa en el distrito más potente del conurbano.

Las posibilidades de acordar una lista única del Frente Renovador, los posicionamientos ante los candidatos a la provincia y la pelea con el oficialismo de Fernando Espinoza, que lidera las encuestas en el distrito, marcan a fuego el juego político matancero.

El viernes se lanzó el concejal Fernando Asencio, que responde a Solá. Reclutaron a su militancia en el Club Norte de San Justo, que corearon "Massa Presidente, Solá gobernador".

Los actos de Solá en distintas zonas del conurbano los habilita Massa como gesto también hacia Martín Insaurralde, que mantiene el suspenso sobre su pase. Lo propio viene haciendo Giustozzi y Posse. 

Ayer bajaron Mirtan Tundis y Darío Giustozzi, para inaugurar una nueva sede de la Federación de la Tercera Edad, en Isidro Casanova.  Estuvieron también los legisladores nacionales, Azucena Ecohosor, Liliana Schwindt, Marcelo D ´Alessandro.

Los acompañó Miguel Saredi, uno de los candidatos de Massa en el distrito, muy activo en la pelea con la inseguridad y cercano también a Gustavo Posse, con quien coordinó caminatas por varias zonas de La Matanza.  Saredi también aprovecha su acercamiento a la ex Gran Hermano, Rocío Gancedo, cuyos comentarios militantes explotan en las redes sociales y hacen ruido en los medios.

Llamó la atención la ausencia en el acto con los jubilados de Isidro Casanova de Ruben “El Negro” Ledesma, que hasta ahora militaba por la candidatura de Giustozzi.

Ledesma fue uno de los primeros operadores de Néstor Kirchner en el conurbano. Ahora diputado provincial, el líder del sindicato de Comercio es un viejo lobo del distrito y tras pasar por el macrismo y Unión Pro, hoy le ofrece a Massa una estructura nada desdeñable, aunque incapaz hasta ahora de superar primero a Balestrini y luego a Espinoza.

Lo único cierto en el distrito es la jefatura de Massa. Mientras siguen las especulaciones por el pase de Martín Insaurralde, los dirigentes locales juegan con varios de los candidatos a Gobernador.

Asencio, por su lado, se mantiene dentro de la línea felipista, pero Saredi se muestra tanto con Giustozzi como con Posse. La semana pasada llevó a víctimas de la inseguridad a un encuentro con Massa, el intendente de San Isidro y más de una decena de jefes comunales.

Con todo, las encuestas las sigue liderando el oficialismo encabezado por Fernando Espinoza. Pero es sólo su figura la que mantiene los votos, mientras que a la hora de medir a sus candidatos Verónica Magario, o el senador provincial Daniel Barrera, éstos son superados por los candidatos del massismo. Sin embargo, una candidatura de Espinoza a la gobernación o la vicegobernación podría ser un buen arrastre para los dirigentes oficialistas.

Los massistas más pesimistas buscan superar una lista que encabezaría Daniel Scioli a la presidencia, Florencio Randazzo a la gobernación y Fernando Espinoza como vice. La tracción de esta lista en La Matanza sería letal para el Frente Renovador.

Por eso, algunos dirigentes ya le avisan al tigrense el peligro de avanzar en unas primarias, que deje al ganador enfrentado a sus rivales internos, y termine volcando a los perdedores a socavar las posibilidades del candidato en las generales de octubre.

Massa cuenta con otros dirigentes como Ariel Martínez, cercano al Pato Galmarini, Alfredo Gonzalez, un matarife de Villa Madero que está pegando carteles por el distrito; el concejal Abraham “Toto” Delgado, de Graciela Camaño, y un último dirigente en sumarse: Raúl Leguiza, quien fuera hombre de Alberto Pierri.