Horas antes de que llegara Daniel Scioli a Mendoza a presentar a sus economistas más cercanos, el vicegobernador Carlos Ciurca, llamó a conferencia de prensa para presentar a “otro compañero que quiere ser gobernador”. Así, junto al presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia, Jorge Tanús (quien también se ha lanzado como precandidato), Ciruca bendijo a Omar Félix, el director por Mendoza en YPF.

Todo era muy raro, llamó la atención el momento elegido, los protagonistas, Ciurca bendiciendo a ambos precandidatos, quienes afirmaron estar “muy contentos” y remarcar que “el partido se hará más fuerte mientras más precandidatos hayan”.

El detalle es que el año que viene, Mendoza por primera vez votará en PASO provinciales, y el peronismo, todo indica, no acordará como es costumbre a su candidato en reuniones secretas de espaldas a la ciudadanía.

A los mencionados Tanús (azul) y Félix, ya se han lanzado el intendente de Las Heras, Rubén Miranda, y el senador nacional Adolfo Bermejo (también azul).

Pero la puesta en escena de Ciuca fue en realidad un mensaje a un amigo íntimo de gobernador Pérez: Matías Roby. El médico deportólogo que asumió a principios de año como ministro de Salud, ha manifestado que le interesa pelear por la Gobernación. Lo que no ha dicho es por qué partido. Ha coqueteado con el PRO y con Frente Renovador, y ha remarcado que él podría competir “por cualquier partido” porque no está afiliado al PJ.

“Si Roby quiere competir, deberá afiliarse, sino el partido de ninguna manera lo apoyará”, aclaró Ciurca en la conferencia de prensa. El mensaje fue claro: el apuntado es Pérez, quien no tiene gran incidencia puertas adentro del peronismo ortodoxo más allá de haber sido proclamado a mitad de año como presidente del PJ mendocino.

El cruce ocurrió el mismo día en que Daniel Scioli, en dos horas de visita en Mendoza, presentó sus ideas económicas de la mano de los economistas Miguel Bein y Mario Blejer, le pegó a Mauricio Macri y le prometió a Pérez “un lugar importante” en su equipo político. No obstante ratificó que su hombre en Mendoza es Ciurca, quien viene trabajando desde hace meses en las actividades de la “ola naranja” y cada vez suma más dirigentes a su posicionamiento dentro de sciolismo.