Un grupo de banqueros estaría impulsando el lanzamiento de un “bono patriótico” para absorber el exceso de circulante que deberá emitir el Banco Central para financiar el déficit.

El rumor que circula en la city es que una de las entidades implicadas en la operación es el Banco Galicia, que junto a otros pesos pesados del mercado local planean sacar provecho de la inundación de billetes que se vendrá en esta segunda mitad del año.

La lógica del bono patriótico, que bautizó el ex ministro de Economía Domingo Cavallo, consiste en una operación acordada entre el gobierno y los bancos privados, usualmente para ayudar al Tesoro, por medio de un papel que rinde una tasa de interés.

En este caso el camino sería inverso: las entidades financieras colocarían el bono a cambio de captar una parte de los pesos que tendrá que emitir el Central de acá a fin de año para financiar los gastos del gobierno, que los pronósticos más optimistas ubican en un piso de 100 mil millones.

Incluso algunos analistas postulan que la cifra estará entre 130 y 150 mil millones de pesos.

Es que es en esta segunda parte del año cuando aparecen las urgencias fiscales más importantes. Entre enero y julio se imprimieron $12.000 millones con este objetivo, según el economista Luis Secco. El mismo monto que se emitió en junio y en julio por separado. 

En lo que va de agosto, el Central ya llevaba girados al Tesoro unos $18 mil millones, estimó Secco.