Canje
Weretilneck le dio a Cristina los votos para el canje a cambio de la vicegobernación
Los dos diputados del gobernador que se pasó al massismo, votarán el proyecto oficial. A cambio, pudo echar al vice de Pichetto.

Después de romper con el Gobierno y blanquear su pase al massismo, el gobernador de Río Negro Alberto Weretilneck acordó que sus diputados Hermán Avoscán y Luis Bardeggia voten el nuevo canje de deuda, a cambio de barrer a su vicegobernador Ariel Rivero, que respondía a Miguel Pichetto.

El viernes Weretilneck logró imponer a Pedro Pesatti y torcer la voluntad del jefe de senadores del Frente para la Victoria, quien le había ordenado a Rivero cerrar la Legislatura para evitar ser destituido. No logró renovar el contrato con Petrobrás, muy cuestionado por YPF. 

Pichetto volvió a ser moneda de cambio y debió ceder tras una gestión de Jorge Capitanich, a cargo de negociar una tregua con Weretilneck, el primer gobernador que pegó el salto sin escalas del oficialismo al massismo.

A cambio, el gobernador logró que sus dos diputados no dejaran el bloque oficialista y adelantaran su apoyo a la ley de abastecimiento y al nuevo canje de deuda, los dos proyectos que Cristina quiere sancionados cuanto antes.

“La idea era armar un bloque rionegrino. Pero entendimos que el objetivo se había conseguido y no tenía sentido devolver con la misma moneda, poniendo palos en la rueda”, le dijo a LPO Avoscán, quien integra la conducción nacional del Frente Grande, de donde proviene Weretilneck.

Hasta noviembre su nexo con la Nación era Juan Manuel Abal Medina, otro sobreviviente de la ex fuerza de Chacho Álvarez, pero con su salida debió pasar por el filtro de Capitanich, justo un viejo amigo de Pichetto.

“El pase al massimo de Weretilneck fue una decisión de él. El problema que tuvimos es que Pichetto adelantó los tiempos de la candidatura”, planteó Avoscan.

La certeza de no perder a los dos rionegrinos le permitió a Juliana Di Tullio asegurar el sábado contar con los votos para sancionar la reapertura en el país del canje de deuda, que el miércoles comienza a debatirse en el Senado.

Por las dudas, no habló de la ley de abastecimiento. Y telefoneó a cada diputado de su bloque para pedirle que no viajara al exterior al menos al 10 de octubre, la fecha estimada para tratar el presupuesto.

El Frente para la Victoria cuenta con 118 diputados propios y supera los 129 necesarios para el quórum con siete aliados del Frente Cívico de Santiago del Estero, tres de Nuevo Encuentro y un puñado de independientes: los fueguinos Oscar Martínez (UOM), Graciela Boyadjian (Movimiento Popular Fueguino); Gustavo Fernández Mendía (PJ La Pampa) y Alicia Comelli (Movimiento Popular Neuquino).

De ese grupo sólo está en duda Graciela Boyadjian, del Movimiento Popular Fueguino, un partido que cerró un acuerdo con Massa. La disputa entre Neuquén y Cristina Kirchner por la nueva ley de hidrocarburos, al menos por ahora, no hará que Comelli se mude a la oposición.

“Estamos en una situación difícil, así que cualquier alternativa que ratifique que Argentina quiere seguir pagando me parece bien”, adelantó la diputada a LPO.

Entre los chubutenses, la otra provincia en conflicto por esa norma, sólo la sindicalista Mónica Contrera respaldó al gobernador Martín Buzzi, denunciado por la AFIP de contar con cuentas bancarias en paraísos fiscales. Su coterráneo Mario Pais, también del FPV, todavía no dijo nada.

Massa le puede tomar a Martín Insaurralde, si es que finalmente lo suma al Frente Renovador. Y en el kirchnerismo no descartan traer a Javier Tineo, actual ministro de Producción de La Rioja. 

Di Tullio confía además en una ayuda extra de Ramona Puchetta, la ex ladera de Raúl Castells, aliada del bloque de Adolfo Rodríguez Saá hasta el año pasado, pero dispuesta a colaborar con el kirchnerismo cuando tiene números ajustados.

Suele ser premiada con viajes al exterior. De hecho, mientras todos los oficialistas están obligados a no cruzar las fronteras, Puchetta está en Panamá.

El resto de la oposición anticipó su rechazo, aunque Claudio Lozano y Elisa Carrió, cada uno con un bloque de tres, especularon con abstenerse en caso de que su voto negativo frustre el proyecto, para evitar la incómoda responsabilidad de bloquear una alternativa más en la negociación con los buitres. Lo mismo haría Victoria Donda, de Libres del Sur.

No fueron los únicos que especularon: ayer, cuando el kirchnerismo ya festejaba la mayoría, el cordobés Juan Schiaretti adelantó que él y sus dos coterráneos de Unión Por Córdoba no acompañarían, pese al respaldo que había dado José Manuel de la Sota.

Como adelantó LPO, De la Sota se reunió el jueves con Adolfo Rodríguez Saá y Sergio Massa y acordaron ir juntos a las primarias. En la reunión hablaron sobre la conveniencia de no votar divididos.

Publicar un comentario
Para enviar su comentario debe confirmar que ha leido y aceptado el reglamento de terminos y condiciones de LPO
Comentarios
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellas pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Aquel usuario que incluya en sus mensajes algun comentario violatorio del reglamento de terminos y condiciones será eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
Noticias relacionadas

Weretilnek pudo echar al vice de Pichetto pero perdió el contrato de Petrobras

La puja del gobernador con el jefe de bloque del kirchnerismo, terminó en una derrota cruzada.

De la Sota, Rodríguez Saá y Lozano, los aliados que tienta el Gobierno para el nuevo canje de deuda

LPO
Los cinco diputados del puntano y los tres del cordobés podrían ayudar. Lozano, el otro colaborador.