La legisladora porteña Gabriela Cerruti tuvo una noche de furia en el programa Intratables porque la hicieron esperar más de una hora y se peleó con el conductor Santiago del Moro, que la comparó con Zulma Lobato.

La dirigente ya había avisado por Twitter que iba sin muchas expectativas. Según explicó después, llegó a las 21.30 al estudio del canal América y esperó hasta las 23 cuando recién ahí el conductor anunció que iba le iba a dar aire. Pero Cerruti ya había decidido irse, como alguna vez hizo Luis D'Elía.

“Me estaba yendo porque me hicieron venir diez menos cuarto. Organicemos con la producción cuando y venimos cuando quieran”, dijo. “Pero me dijeron que no querés hablar de economía”, replicó Del Moro. “No quiero hablar de economía, si no sé de economía”, contestó.

Del Moro la quiso convencer y presentó un informe sobre las declaraciones xenófobas de Sergio Berni y Hugo Curto. Pero Cerruti igual se iba. “Es una falta de respeto para la gente que invitan, cumplan alguna vez lo que acuerdan con la producción”, se quejó. “Es un programa en vivo, Gabriela ¿vos me estás cargando?”, le retrucó el conductor.

Del Moro se quedó molesto y le disparó con todo. “No entiendo este desplante. Tres personas me han hecho este desplante al aire en un programa. Una fue Zulma Lobato”, la chicaneó. “Estamos en un programa, ¿cuál es el problema de venir a hablar? Si se quiere ir, que se vaya todo el mundo. La puerta mide siete metros, el que se quiere ir que se vaya”, continuó el conductor, que irónicamente recalcó que faltaba media hora de programa.

“¿No está Vicky Xipolitakis?”, bromeó uno de los columnistas. El publicista Fernando Braga Menéndez salió del estudio para tratar de convencerla pero no lo logró. “Está muy alterada”, indicó. Tras recordar que Cerruti es periodista, Del Moro le reprochó el desplante al aire: “Si te querés ir, te vas o no venís. Pero hacer esto al aire no está bueno”.

Cerruti hizo su descargo por Twitter. “Si un programa de televisión no tiene el mínimo respeto por su invitado y las pautas que acuerda, no hay por qué someterse”, escribió y agregó: “Creen que todos nos morimos por cinco minutos de tele. No es mi caso. Respeto y me hago respetar”.