Sergio
Massa no pudo haber elegido un mejor momento para regresar a Rosario luego de
varios amagues: Monopolizó el cierre del congreso de la prestigiosa asociación
de siembra directa Aapresid, confirmando la buena sintonía que tiene con el
campo que ya se había notado en su visita a La Rural de Palermo.
El líder del Frente Renovador venía eludiendo el regreso a Santa Fe por los roces internos que había en el heterogéneo armado massista, sobre todo entre el senador Carlos “Lole” Reutemann y el diputado Oscar “Cachi” Martínez.
Rápido de reflejos, Martínez aprovechó la ausencia de Reutemann para mostrarse como “el” hombre de Massa en Santa Fe. En rigor, la ausencia del ex piloto no tuvo que ver con su interna con “Cachi” sino con una pelea mucho más brava: la que mantiene con el gobernador socialista Hermes Binner.
El socialismo periódicamente acorrala a Reutemann con las numerosas denuncias penales que le quedaron por la represión del 2001 y los muertos de las inundaciones, que para el senador nunca terminan de cerrarse por una mano negra de los socialistas.
Posible candidato a vicepresidente de Massa, el Lole le aviso que prefería ahorrarse el disgusto de sentarse junto a Binner y quedaron en juntarse a comer el próximo martes. Además, el martes 18 irán juntos a La Rural de Junin. Reutemann es marca registrada entre los votantes rurales.
Pero hoy el gran ganador en esta inetrna fue “Cachi” que no podía disimular su euforia: “Sergio es un hombre tocado por Dios y conoce los criterios de eficiencia que se necesitan para gobernar el país” , exageró exultante y aprovechó para lanzarle un dardo a los senadores departamentales que a principio de año lanzaron la Juan Domingo en apoyo a Scioli y que ahora están en conversaciones con el Frente Renovador.
“Ahora son la Juan Lunes y no sería raro que pasado se conviertan en la Juan Martes”, ironizó “Cachi”.
Massa encontró así en Aapresid una excusa perfecta para volver a Santa Fe sin tener que desairar a unos u otros del volcánico armado renovador, robándole además Binner un escenario que imaginaba podría ofrecerle una rentrada fuerte a su alicaída campaña presidencial.
Señales de Scioli
Daniel Scioli no fue a Aapresid, pero no perdió la oportunidad para mandar un nuevo gesto de diferenciación de la política agropecuaria kirchnerista. Mandó a su ministro de Asuntos Agrarios, Alejandro "Topo" Rodríguez, quien llamó a "hermanarse con el campo" y "no quedarse enganchados en disputas del pasado".
En un panel que integró con el ministro de Agricultura de Córdoba, Julián María López, y el secretario de Agricultura de Santa Fe, Luis Contigiani, el ministro de Scioli llamó a hacer un "Pacto Agropecuario Nacional”.
"Así podremos lograr consensos en torno a políticas que consoliden el paso del crecimiento al desarrollo en materia agroindustrial", explicó Rodríguez, se volvió a meter con el tema de las retenciones, que en su momento indignó a la Casa Rosada, que llegó a reclamar su renuncia.
"Es tiempo de marchar hacia una redefinición selectiva de retenciones, por región, por tipo de actividad o producto y por escala de productor", definió el ministro de Asuntos Agrarios delante de un auditorio repleto de productores rurales.
"En el caso del trigo, hemos planteado la
necesidad de reducir las retenciones del 23 al 13 por ciento y, junto con eso,
optimizar los mecanismos que permitan aprovechar la potencialidad exportadora
sin que esto perjudique el consumo popular", agregó.
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Una de las presencias que más llamó la atención en el Congreso en Rosario fue la del secretario de Agricultura, Gabriel Delgado, que ya había asistido al Congreso de Maizar, y que de esta manera dijo presente en un evento al que la mayoría de los kirchneristas le esquivan.
Es que Delgado -a diferencia de otros funcionarios del Ministerio de Agricultura- es bien visto por productores y dirigentes del agro y actúa, si se quiere, como una especie de nexo de acercamiento y diálogo entre el sector y el ministro Carlos Casamiquela.
"Tenemos el enorme desafío de generar valor, producción y sustentabilidad", afirmó Delgado cuando le tocó hablar en medio de un respeto que muy pocos dirigentes kirchneristas logran con el campo.
También pasó por AAPRESID otro d elos pocos kirchneristas que lograron establecer un vínculo racional con el campo. El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, quien aprovechó para presentar junto al titular de la Comisión de Agricultura, Luis Basterra, el proyecto de Ley de Suelos.
El tema es que muchos productores le reclamaron a Domínguez y Basterra la presencia del resto de los integrantes de la Comisión de Agricultura, que éste año se reunió más veces en las exposiciones rurales (AgroActiva, INTA Expone y AAPRESID) que en el Congreso.
En este sentido, y ante ciertos reproches, Domínguez reconoció por segunda vez que "hemos cometido errores con el tema del trigo".