El intendente de Pilar, Humberto Zúccaro, estudia aplicar un arancel a la salud pública, destinado a los pacientes que lleguen de otros distritos, que en su mayoría son vecinos de los menos opulentos distritos de Moreno, José C. Paz y Escobar.

Zúccaro reedita un frustrado proyecto de Macri, que buscaba cobrar un reintegro a los pacientes que se trataran en los hospitales de la Ciudad, provenientes del Conurbano. En el Pro justificaban la medida argumentando que la mitad de los recursos hospitalarios en la Capital se utilizaban para atender pacientes de la provincia.

Lo mismo intentó el ex ministro de Asuntos Agrarios de Daniel Scioli y actual intendente de Cañuelas, Gustavo Arrieta, que esta semana casi se agarra a piñas con vecinos y a principios de año impulsó un impuesto de 40 pesos para aquellas personas que se atiendan en el hospital municipal y no tengan domicilio local.

Según Zúccaro “en 2003 los pacientes de otros distritos eran el 8% o 9% del total, y hoy representan casi un 40%. La situación cambió, y como intendente hay que garantizar que los pilarenses tengan l prioridad en la salud”.

Zúccaro criticó el sistema de salud de Escobar y cargó también contra el kirchnerista Mariano West, de Moreno. “Es fácil hacer casas como hacen en Moreno, si no invierten en la salud y los pacientes se atienden acá o como pasa en Escobar, que el hospital funciona mal y vienen a Pilar”, fustigó.

De cualquier manera, el jefe comunal señaló que la iniciativa está pensada para cuando se construye el nuevo hospital municipal, recién el año que viene.

“Es una decisión personal que creo que en algún momento en Pilar se va a tener que plantear, a nivel de los poderes Ejecutivo y Legislativo”, comentó a El Diario, aunque aclarando que “no será en 2014 ni en 2015, cuando vamos a empezar a construir e inaugurar el nuevo hospital”.

Zúccaro había anunciado la medida a principio de año, al abrir las sesiones del Concejo Deliberante. Y en sus últimas declaraciones ratificó que la “decisión está tomada”.