Sergio Massa elogió hoy al gobernador Alberto Weretilneck y cuestionó al senador kirchnerista Miguel Ángel Pichetto, a quién definió como “la vieja política". El líder del Frente Renovador pasó por Neuquén pero aprovechó para agigantar aún más las diferencias políticas entre el PJ y el Frente Grande en Río Negro.

“Weretilneck es casi un independiente que fue parte de una alianza que permitió que hubiera un cambio de signo político en Río Negro. Ahora está siendo víctima de la presión de la vieja política, de los que desde los cargos pretenden cambiar la voluntad de la gente", dijo Massa en una rueda de prensa.

Como adelantó LPO, el mandatario mantuvo un encuentro con Massa en la ciudad de Buenos Aires a fines de mayo. Desde esa reunión, los rumores de un pase comenzaron a sonar cada vez más fuerte y Weretilneck podría convertirse en el primer gobernador del Frente Renovador.

Massa recordó hoy ese encuentro. “Fue en el cumpleaños de un amigo común", dijo y agregó que charlaron sobre la gestión durante dos horas y media. "Esa charla generó una relación que nos ha permitido intercambiar información de políticas productivas, de carga impositiva, de necesidades de esta provincia", sostuvo.

Desde ese polémico cumpleaños, la relación del gobernador rionegrino con el peronismo en su provincia fue todo cuesta abajo. La alianza que mantenía el poder se quebró definitivamente. El diputado Martín Soria se pegó a Pichetto y Weretilneck quedó aislado con remanentes del Frente Grande. Ahora, es el propio Pichetto quien se anima a afirmar que el gobernador podría saltar al massismo.

En el medio de esa pulseada quedó la renegociación de un contrato con Petrobras que debe aprobar la Legislatura. Sin el peronismo, el gobernador no tiene los votos para avanzar en esa prórroga.

Los días pasan y la tensión es cada vez mayor, toda vez que el gobierno ya firmó un entendimiento con la petrolera por un desembolso directo de unos 100 millones de dólares de los cuales la mitad serán depositados en las cuentas de la provincia apenas la Legislatura apruebe la prórroga.

Con todo, las posibilidades de un salto al massismo parecen cobrar más fuerza. Según pudo saber LPO, ministros orgánicos al Gobernador y funcionarios de segunda línea ya trabajan para Massa. Quien sirve de nexo es Dámaso Larraburu, armador político en el sur del territorio bonaerense.

"Le exigen definiciones a Weretilneck pero no dan definiciones. Que digan qué piensan de Boudou, por ejemplo, esos que presionan al gobernador de Río Negro", dijo Massa hoy tras visitar el yacimiento de Vaca Muerta.

Tras el quiebre con el kirchnerismo, el rionegrino tiene un escenario de gobernabilidad complicado. Es que presionado por Pichetto, la semana pasada renunció el ministro de Seguridad, Oscar Albrieu. En tanto, otros dos ministros estarían muy cerca de pegar el portazo. Uno de ellos es Haroldo Lebed, titular de la cartera de Agricultura, Ganadería y Pesca. El otro es el ministro de Obras y Servicios Públicos, Julio Arrieta. Todos llegaron a sus cargos en el marco de un acuerdo político tras la trágica muerte de Carlos Soria.

Weretilneck no logra contener al peronismo. Pero, para sorpresa, La Cámpora en esa provincia se partió y el secretario General de la Gobernación, Matías Rulli, un ex discípulo de Pichetto no sólo decidió quedarse, tentado por su poderoso cargo, sino que no duda en cuestionar al senador kirchenerista.