El proyecto de La Cámpora que condona la millonaria deuda que la empresa Aerolíneas Argentinas mantiene con el Estado bonaerense generó malestar y preocupación en gobierno provincial. Es que la idea del diputado José Ottavis de cancelar ese pasivo podría sentar un serio precedente y abrir la puerta a que otras empresas del Estado exijan el mismo "beneficio".

El proyecto ya tomó estado parlamentario aunque quedó frenado en la comisión de Presupuesto e Impuesto ante las advertencias de la oposición sobre los costos que podría pagar el Estado bonaerense a futuro.

En la Gobernación el ingreso de la iniciativa encendió varias alarmas y dijeron que sólo aceptarían una condonación a cambio de fondos frescos de la Casa Rosada por fuera de la coparticipación federal.

El texto establece que la Agencia de Recaudación bonaerense (Arba) condone la deuda -que asciende a unos 490 millones de pesos- que la aerolínea que conduce Mariano Recalde tiene con la Provincia. Se trata de un pasivo en concepto del impuesto a los Ingresos Brutos por la que el gobierno provincial inició demandas judiciales para perseguir el cobro.

El proyecto de La Cámpora destaca la inyección de fondos por parte del Gobierno nacional hacia la empresa que dirige Mariano Recalde ante "la incapacidad de afrontar el pago de salarios, combustible y rentas de aeronaves". Y agrega que en definitiva esos aportes de Nación van a parar al gobierno bonaerense por el cobro de los impuestos a los Ingresos Brutos. 

“Aerolíneas debería pagar unos 70 millones de pesos por año en concepto de Ingresos Brutos. Por eso, condonar esa deuda significará privar al gobierno de esos ingresos”, dijo a LPO el diputado provincial Mauricio D’Alessandro.

Pero además deja sentado un peligroso precedente: Otras empresas estatales reclamarán por lo mismo. Entre ellas YPF, la empresa más grande del país, y también las empresas de agua como Agua y Saneamientos Argentinos (AySA).

D’Alessandro asegura que no se trata de una deuda que contrajo la actual Aerolíneas con el Estado bonaerense. “Eso es deuda de Marsans, que ahora está en un juicio con Argentina en el Ciadi”, explica.

Marsans está en bancarrota y uno de sus ex dueños, Gerardo Díaz Ferrán, está preso en España por otra causa. El otro, Gonzalo Pascual, falleció. Tras la quiebra de la empresa, apareció un fondo tratando de cobrar un juicio contra Argentina por la expropiación de Aerolíneas. Ese fondo de llama Burford y tiene sede en un paraíso fiscal en el canal de la Mancha.

Los acreedores de Marsans reclaman USS 1200 millones por la expropiación, mientras que el Gobierno entiende que la compañía tenía un valor patrimonial negativo.

Por eso, diputados opositores advierten que si se le condona esa deuda, después no se le descontará al fondo de inversión la deuda condonada. "Es decir, si ese fondo gana en el Ciadi, le vamos a tener que pagar lo que ellos reclaman sin poderle descontar la deuda que ellos mismos generaron", explica D’Alessandro.