Las diputadas del PRO Patricia Bullrich y Laura Alonso denunciaron una "operación en marcha" para apartar al juez federal Ariel Lijo de la causa Ciccone, donde se investiga al vicepresidente Amado Boudou por supuestos delitos de negociaciones incompatibles con la función publica y enriquecimiento ilícito.

Durante toda la jornada en ámbitos políticos y tribunalicios corrieron rumores en torno a una eventual decisión de la Cámara Federal para apartar a Lijo, pero fueron las diputadas de Unión Pro Bullrich y Alonso las que en un comunicado expusieron y denunciaron "la maniobra", según dijeron.

"Quieren hacer el juez Lijo un nuevo Campagnoli", sostuvieron las legisladores en alusión al fiscal de Saavedra José María Campagnoli, que fue apartado de su cargo en diciembre pasado en el marco de un jury iniciado por la Procuradora Alejandra Gils Carbó.

Lijo, en tanto, tiene que decidir un planteo formulado por el fiscal Jorge Di Lello para llamar a indagatoria no solo al vicepresidente sino también a otros implicados en la causa, entre los cuales figura el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray.

La Cámara Federal de Casación Penal rechazó hace dos semanas un recurso de la defensa de Boudou para que la causa quedara en la nada por entender que no estaba claro de qué se acusaba al entonces ministro de Economía.

La defensa de Boudou, en tanto, aguarda la resolución de la Cámara Federal cuestionando que los integrantes de la familia Ciccone hayan sido convocados a la causa como testigos, en vez de haber sido escuchados en una indagatoria como supuestos partícipes de los eventuales delitos.

En ese sentido, Di Lello se opuso a que los Ciccone hubieran sido escuchados como testigos, pero el juez Lijo dejó planteada la controversia y avanzó con las declaraciones.

Lijo llegó a la causa luego de que el entonces juez del caso, Daniel Rafecas, fuera denunciado por haber cruzado mensajes privados con un abogado allegado a la defensa. Esos mensajes fueron difundidos por el propio vicepresidente luego del allanamiento que impulsó el fiscal Carlos Rívolo a su departamento de Puerto Madero, donde se hallaron pruebas en torno a que allí se habría alojado el monotributista Alejandro Vandenbroele, cara visible de la firma The Old Fund, que se hizo cargo de Ciccone.

Ahora, los rumores oficializados por Bullrich y Alonso apuntan a un eventual alejamiento de Lijo de la investigación principal. "No podemos permitir que el juez que ha actuado ajustado a derecho y ha avanzado en la causa que implica directamente al vicepresidente sea apartado. Lo hicieron antes con el juez Rafecas y el fiscal Rívolo. Como ya no pueden sostener la evidencia y los testimonios en el expediente judicial, quieren apartar a Lijo para que no cite a indagatoria a los socios de Boudou y al propio vicepresidente", expresó Alonso.

Por su parte, Bullrich, Presidenta de la Comisión de Legislación Penal, afirmó: "Desde el kirchnerismo quieren hacer con el juez Ariel Lijo lo mismo que hicieron con el fiscal Campagnoli. Frente a esto queremos anticiparnos y denunciar la maniobra antes que intenten su desplazamiento".

Bullrich sostuvo que "una vez más el kirchnerismo, como ha sucedido en numerosas ocasiones en los últimos 10 años, intenta imponer la impunidad".

"Hay que evitar que Lijo sea un nuevo Campagnoli -añadió Alonso- porque eso significaría la muerte de la causa Ciccone y la impunidad para Boudou, (José María) Núñez Carmona, Vandenbroele y otros".