Monseñor Jorge Casaretto logró en una semana que Hugo Moyano, Antonio Caló y Luis Barrionuevo se comprometieran a participar en el Semana Social 2014, un evento que gana importancia ante la posibilidad de que los tres sindicalistas se muestren juntos.

Este lunes, el obispo emérito de San Isidro y miembro de la Comisión Episcopal de Pastoral Social se reunió con el titular del gremio de Camioneros y logró su compromiso para asistir al encuentro que se realizará durante tres días en Mar del Plata, a fines del mes próximo.

El jueves pasado, Casaretto había logrado que el metalúrgico también confirmara su participación, aún cuando ya se sabía de la asistencia de Barrionuevo -se había reunido el lunes con el religioso- y se daba por seguro a Moyano. 

La posible foto entre los tres dirigentes sindicales es un deseo del Papa Francisco. LPO reveló que Bergoglio fue clave en la unión sindical de Moyano y Barrionuevo con algunos gremios otrora oficialistas como La Fraternidad y la UTA. El Papa mantiene un diálogo fluido con gremialistas de distintos sectores y desde el año pasado les insiste con la necesidad de lograr la unidad sindical.

Es por eso que las gestiones de Casaretto fueron agradecidas por un Moyano, de tono mucho más conciliador que tiempo atrás. "Valoramos enormemente el esfuerzo que está haciendo la Iglesia por la unidad en el sindicalismo", señaló el camionero, que se comprometió a "hacer todos los esfuerzos necesarios para la lograr la unidad del movimiento sindical".

Quién no pareció muy de acuerdo con esta idea fue el diputado nacional y jefe del gremio de los Canillitas, Omar Plaini, quien aseguró en el encuentro que "amontonar nombres y hombres no alcanza, tenemos que saber para qué".

En el encuentro también estuvieron presentes Gerónimo "Momo" Venegas (UATRE), Amadeo Genta (municipales), Abel Frutos(Panaderos), Julio Piumato (judiciales), y Facundo Moyano (Peajes), entre otros integrantes de la CGT opositora.

El año pasado, la Semana Social de la Iglesia logró que Moyano y Caló se abracen para una foto que hizo mucho ruido, justo cuando se empezaban a conocer las gestiones del Papa para lograr la unidad. Aquella foto fue definida por el líder sindical opositor como "un milagro de Francisco".  

Aunque fuentes de la UOM dijeron la semana pasada a LPO que los dirigentes podrían no compartir una mesa y recordaron que ese encuentro fue casual, el propio Caló la semana pasada adelantó que no tiene problemas de posar con el camionero: "Lo único que falta es que me haga problemas por una foto".