Hospitales, clínicas, sanatorios y centros de diagnóstico de todo el país resolvieron realizar un paro por 24 horas el miércoles 21 de mayo ante la grave situación económica que afecta al sector. Se suspenderán las consultas y todas las prácticas programadas.

El conflicto se enmarca en la imposibilidad de las obras sociales y prepagas de hacer frente a los aumentos que en los últimos días fijaron los prestadores de medicina privada.

Como adelantó LPO, distintas prepagas comenzaron a recibir notificaciones por parte de sus sanatorios, clínicas y centros de diagnóstico actualizando el costo de sus servicios en hasta un 20%.

“Esto hace eclosión a partir de lo que sucede desde el segundo semestre del año pasado y el primer cuatrimestre de este año”, explicó a LPO Jorge Cherro, titular de Adecra. “En ese contexto todos los aranceles de las clínicas quedaron pulverizados”, agregó.

Cherro, director administrativo del Sanatorio Itoiz S.A, explicó que el conflicto se puntualiza con el Pami y las empresas de medicina prepaga. Sobre éstas últimas puntualizó que “ellas no pueden aumentar las cuotas y por lo tanto no pueden aumentar los aranceles a hospitales”, dijo.

El escenario se presenta como una grave crisis en ese sector de la salud. Al tiempo que los prestadores argumentan que es imposible ignorar la crisis que afrontó la economía en el primer trimestre del año.

A la medida de fuerza adherirán hospitales, clínicas, sanatorios y centros de diagnóstico de todo el país agrupados en la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados de la República Argentina (Adecra) y la Asociación Civil de Actividades Médicas e Integradas (Acami).

El paro de 24 horas será el 21 de mayo pero la medida será repetida el siguiente miércoles 28, pero por 48 horas.

Las prepagas y obras sociales reclaman que la Superintendencia de Servicios de Salud les autorice a subir las cuotas de los afiliados para hacer frente a los aumentos de los prestadores.

Aseguran que no pueden pagar los aumentos de aranceles para hacer frente al desfasaje de precios, debido al aumento de los productos importados que tiene la industria sanatorial y de diagnóstico y el pago de la nueva paritaria que se está llevando a cabo (la cual la estipulan en un 30 por ciento).