El gremio de colectivos y el de maquinistas de trenes se sumarán mañana a la marcha de la CGT disidente a plaza de Mayo, para reiterar los reclamos de último paro del 10 de abril, el mayor de la era kirchnerista.

Fracasó el plan adelantado por LPO para alejarlos del frente liderado por Luis Barrionuevo y Hugo Moyano, a quienes se sumaron en enero y tres meses después permitieron dejar las calles vacías de todo el país.

Y aunque por ahora no está programada una medida similar, mañana quedará demostrado que cuando lo hagan podrán suspender el transporte de todo el país. 

En diálogo con LPO Roberto Fernández, de la Unión Tranviario Automotor (UTA); y Horacio Caminos, de La Fraternidad, confirmaron que participarán del acto de mañana pero aclararon que no frenarán el transporte.

“Lo resolvimos en la última reunión. Trenes va a haber porque es la forma de asegurar que los trabajadores concurran”, sostuvo Horacio Caminos, de la Fraternidad, el gremio liderado por Omar Maturano.

Maturano tiene una dura disputa con Florencio Randazzo, pero como contó LPO, tras el paro del 10 de abril el ministro del Interior bajó los decibeles a la disputa.

Su histórico vínculo con el Gobierno fue a través de Carlos Tomada, a quien responsabilizaron de no haberlo contenido. Lo cierto es que todos los intentos por alejarlo de Moyano fracasaron.

Con Fernández tampoco hubo reconciliación. “Vamos a seguir exigiendo los reclamos del 10 de abril. Mañana vamos a la plaza de Mayo pero el servicio no se verá interrumpido. Tal vez sólo llevemos a los del turno mañana”, confirmó a LPO.

Para intimidarlo, en el Gobierno dejaron trascender que difundirían denuncias de malos manejos financieros de la UTA, lo que en la jerga política se conoce como “un carpetazo”. Nunca lo hicieron.

Sólo habla Formento

Para evitar guerra de egos, el acto de mañana no tendrá oradores principales y la única voz oficial será la del locutor Jorge Formento.

En plaza de mayo, el ex conductor de Feliz Domingo leerá el petitorio con los mismos reclamos del 10 de abril: los reclamos que se reiterarán son las paritarias libres, el aumento del mínimo no imponible y la lucha contra la inflación y la inseguridad.

Los gremios se concentrarán en las inmediaciones de la 9 de julio y desde ahí partirán a la plaza, como hicieron en aquella jornada de paro de noviembre de 2012.

Esa vez Moyano no pudo copar la plaza y fue el único orador. Mañana esperan que todo será muy diferente.